Español

Lo que necesitan los trabajadores automotores para ganar la batalla contractual en las Tres Grandes de 2023

Para una discusión sobre unirse a la red de comités de base de los trabajadores automotores, completa el formulario al final de esta declaración. Regístrate para recibir actualizaciones por mensaje de texto sobre la lucha por el convenio de los Tres Grandes enviando un mensaje de texto con AUTO al (866) 847-1086.

Trabajadores de Stellantis Warren Truck en el cambio de turno Los trabajadores de Ford se manifiestan tras el anuncio del cierre de la planta de Saarlouis, 22 de junio de 2022

En poco más de dos meses, el 14 de septiembre, expirarán los convenios que cubren a 150,000 miembros de United Auto Workers (UAW) en Ford, General Motors y Stellantis. Por primera vez en años, los convenios para otros 20.000 trabajadores automotores en las Tres Grandes en Canadá expirarán al mismo tiempo, presentando una oportunidad extraordinaria para una poderosa lucha coordinada internacionalmente.

Para garantizar que esta oportunidad se aproveche y resulte en una clara victoria para los trabajadores, pedimos la formación de comités de base en cada fábrica, almacén y lugar de trabajo.

Una red de tales comités en toda la industria proporcionará el marco organizativo necesario para una lucha coordinada y unificada de todos los trabajadores por salarios más altos y condiciones de trabajo decentes y preparará el terreno para una huelga internacional de los trabajadores de Ford, GM y Stellantis en toda América del Norte.

Las demandas de la Red de Comités de Base de Trabajadores Automotores en su declaración del 9 de julio

Cuáles son los principios fundamentales que dirigen la lucha por el convenio

Los trabajadores están entrando en una batalla histórica. Todas las corporaciones automotrices están en una feroz competencia para reestructurar sus operaciones, recortando costos y eliminando empleos, con el fin de dominar los mercados y las tecnologías para vehículos eléctricos (EV). Las empresas tienen la intención de financiar la transición a los vehículos eléctricos mientras mantienen sus gigantescas ganancias aumentando la explotación de los trabajadores, ya sea manteniendo los salarios por debajo de la inflación, alargando la jornada laboral, aumentando las cuotas de producción u otros medios.

Con la transición a los vehículos eléctricos que se entrecruza con una crisis económica inminente y el gasto masivo de los Estados Unidos en el ejército y la guerra, los gigantes automotores se están preparando para llevar a cabo una carnicería de empleos en todo el mundo de dimensiones asombrosas, con las condiciones de vida de cientos de miles o incluso millones de trabajadores en peligro. El CEO de Ford, Jim Farley, ha declarado que la producción de vehículos eléctricos requerirá un 40 por ciento menos de personal para llevarse a cabo.

Las compañías se están preparando claramente para una huelga e intentan intimidar a los trabajadores. En una provocación, Stellantis ha puesto varias de sus fábricas en 'estado de planta crítica' durante 90 días, a partir del 5 de julio, lo que significa que los trabajadores pueden verse obligados a trabajar 12 horas al día, los siete días de la semana. El aparato del sindicato UAW no está ofreciendo ninguna oposición seria, lo que permite a la compañía almacenar existencias antes de una huelga.

Las condiciones a las que se enfrentan los trabajadores ya son intolerables.

  • Los trabajadores han sufrido unn gran deterioro de los salarios reales y las condiciones de trabajo. Los miserables aumentos salariales, para los trabajadores que hayan recibido aumentos, han sido más que consumidos por el incremento del coste de vida, y solo los precios de los alimentos crecieron más del 20 por ciento de 2018 a 2022. La jornada de ocho horas se ha convertido en una cosa del pasado, con más y más horarios de trabajo que funcionan 10 o 12 horas al día, seis o siete días a la semana. Al mismo tiempo, los turnos son suspendidos con poco tiempo de aviso, lo que lleva a una lucha para asegurar la asistencia por desempleo, mientras los trabajadores temporales son dejados por el UAW a su suerte, sin ninguna protección.
  • La frenética búsqueda de ganancias por parte de las corporaciones ha convertido las fábricas en los llamados países más ricos del mundo en talleres de explotación y trampas mortales, en las que los trabajadores son asesinados, mutilados y enferman a diario. En los tres años de la pandemia de COVID-19, innumerables trabajadores automotores han perdido la vida innecesariamente debido a la priorización de las ganancias sobre las vidas. A pesar de que la pandemia ha sido declarada falsamente 'terminada' por todo el establishment político y los medios de comunicación, el virus continúa propagándose y evolucionando, lo que lleva a los trabajadores a infectarse una y otra vez y aumenta la probabilidad de los efectos debilitantes del COVID persistente.
  • Los fabricantes mundiales de automóviles están diezmando los empleos de los trabajadores a nivel internacional. Las plantas que alguna vez emplearon a miles de personas hace solo unos años, como Stellantis Belvidere Assembly en Illinois y Ford Romeo Engine en Michigan, ya no están en funcionamiento, solo son los primeros disparos en la nueva ofensiva corporativa contra los empleos de los trabajadores.

    En las últimas semanas, Ford ha anunciado cientos de recortes de empleos de trabajadores asalariados y contratados en Australia, Canadá y Estados Unidos, ampliando la ola de despidos que ha llevado a cabo en Alemania, España, India y otros lugares durante el año pasado. El 28 de junio, Stellantis anunció el cierre de su planta de motores en Viena, Austria, despidiendo a 300 trabajadores, y también ha estado recortando cientos o miles de empleos este año en los Estados Unidos, Italia y Eslovaquia. GM, mientras tanto, está eliminando miles de puestos a través de adquisiciones.
Trabajadores de Ford se manifiestan tras el anuncio del cierre de la planta de Saarlouis, 22 de junio de 2022

Los trabajadores jóvenes no pueden permitirse formar una familia o mudarse de las casas de sus padres. Los trabajadores jubilados apenas pueden permitirse comer o pagar las facturas con sus escasas pensiones, si las tienen. Cada vez más trabajadores de todo el mundo están convencidos de que las cosas no pueden seguir como están y que algo tiene que cambiar.

En 2023, los trabajadores han lanzado repetidamente grandes huelgas que involucran a cientos de miles o millones, desde trabajadores en Francia que se oponen a los recortes de pensiones del presidente Macron, hasta conductores de tren en Alemania, pilotos en España, trabajadores de la salud y educadores en el Reino Unido, y trabajadores del sector público, puertos y vagones de carga en Canadá que luchan contra el aumento del coste de los alimentos y la energía. En los Estados Unidos, los trabajadores han tratado repetidamente de defenderse en los últimos años, desde la lucha de 100.000 trabajadores ferroviarios en 2022 o las huelgas de 50.000 trabajadores académicos del UAW en la costa oeste el otoño pasado, hasta las huelgas en curso de los operarios de locomotoras en Pensilvania y de decenas de miles de guionistas de cine y televisión.

En cada caso, sin embargo, el principal obstáculo que enfrentan los trabajadores en lucha son las enquistadas burocracias sindicales, que han aislado y saboteado sistemáticamente las huelgas y han hecho cumplir las demandas de las empresas y el Estado.

La burocracia propatronal del UAW continúa bajo la administración de Fain

El presidente del UAW, Shawn Fain, habla en una reunión [Photo: UAW]

La disminución masiva en los niveles de vida de los trabajadores automotores, una vez entre las más altas de todos los trabajadores industriales del mundo, no habría sido posible si no fuera por la complicidad de la burocracia del UAW. En los últimos 40 años, los ejecutivos del UAW han trabajado con la gerencia para imponer el sistema de niveles, eliminar las pensiones y los ajustes por costes de vida (COLA), reducir nuestros salarios y destruir cientos de miles de empleos.

El aparato de la UAW, como el de Unifor en Canadá y los aparatos sindicales pro corporativos en otros países, es un 'sindicato' sólo en el nombre. En lugar de unir a los trabajadores y luchar por nuestros intereses, nos aísla y trabaja constantemente para hacer cumplir los deseos de la empresa. Un escándalo de corrupción masiva reveló que los altos dirigentes del sindicato estaban aceptando sobornos corporativos o malversando las cuotas de los trabajadores, y las investigaciones federales sobre la mala conducta de los dirigentes siguen en curso, según informes de prensa recientes.

Los primeros 90 días de la administración del presidente del UAW, Shawn Fain, y el grupo Unite All Workers for Democracy (UAWD) son una demostración irrefutable de que el problema no eran unas pocas 'manzanas podridas' en la dirección sindical. El problema es el enorme aparato sindical que está totalmente en deuda con las corporaciones y no rinde cuentas ante los trabajadores de base.

Bajo Fain y el UAWD, la burocracia del UAW vendió la huelga de los trabajadores de baterías de automóviles en Clarios, actuando tan traicioneramente como lo habría hecho bajo los ex presidentes del UAW Ray Curry, Gary Jones o Dennis Williams. El Local 12 del UAW, el director de la Región 2B del UAW, Dave Green, y UAW International impulsaron un convenio a favor de la empresa para los trabajadores que incluía solo un aumento salarial del 3 por ciento e introdujo jornadas laborales de 12 horas sin horas extras.

Piquetes en Clarios en Holland, Ohio el 31 de mayo

Los trabajadores de Clarios lucharon valientemente, y dos veces se rebelaron contra los acuerdos del UAW con la dirección, votando para rechazarlos primero por un 98 y luego por un 76 por ciento. Los funcionarios sindicales respondieron a estos abrumadores votos 'no' no escuchando las demandas de los trabajadores, sino haciendo todo lo posible para romper su lucha, aterrorizados de que el desafío de los trabajadores galvanizara la oposición y alentara la acción independiente de los mismos. El UAW mató de hambre a los trabajadores de Clarios dándoles solo 500 dólares a la semana en subsidio de huelga, los mantuvo en la oscuridad en sus conversaciones con la gerencia, solo proporcionó 'aspectos destacados' del contrato cuidadosamente seleccionados antes de las votaciones de ratificación, y prácticamente censuró la huelga para mantener desinformados a otros miembros del UAW.

Si hubiera alguna ligera duda sobre dónde se encuentra la administración de Fain, debería disiparse de una vez por todas por su decisión de ordenar a los locales del UAW en los Tres Grandes para que continuaran utilizando baterías producidas por esquiroles de la planta de Ohio Clarios, a pesar del amplio apoyo entre los trabajadores para expandir la huelga. Un grupo de comités de base, en GM Flint y Lansing y Stellantis Warren Truck, lucharon contra la complicidad de la burocracia con las compañías, exigiendo repetidamente que se implementara una prohibición para el manejo de baterías fabricadas por esquiroles.

Las acciones pro corporativas del UAW no se limitaron de ninguna manera solo a Clarios. En junio, el humo sin precedentes de los incendios forestales de Canadá, impulsado por el cambio climático, ahogó con una neblina sofocante plantas en Michigan, Ohio, Indiana, Illinois y otros estados. En algunas de las fábricas más afectadas, los trabajadores luchaban por respirar, con informes de que varios se desmayaron en las líneas. Fain y el oficialismo del UAW no pronunciaron ni una palabra en defensa de los trabajadores, permitiendo a las empresas continuar la producción en condiciones peligrosas.

Dentro de una planta automotriz llena de humo en junio

Las acciones rompehuelgas de la administración de Fain y la burocracia del UAW en Clarios, y su silencio durante los incendios forestales, son una advertencia de lo que están planeando en las Tres Grandes y otras compañías, como los fabricantes de componentes y Mack Trucks, donde los contratos expiran este año.

Adoptando una pose de militantes críticos con la 'codicia corporativa', la sede del UAW ha publicado recientemente declaraciones y videos que destacan las enormes ganancias de las Tres Grandes, por un total de un cuarto de billón en la última década. 'Nuestros miembros nunca se recuperaron de los sacrificios que hicimos en 2009', afirma Fain.

¡Qué hipocresía! La brutal reestructuración promulgada en 2009 se llevó a cabo con el apoyo de la burocracia del UAW, incluido el propio Fain. Fain respaldó el contrato de 2009 como miembro del Comité Nacional de Negociación UAW-Chrysler, diciendo en ese momento: 'No estamos contentos con esto, pero tienes que hacer lo que tienes que hacer'.

Mientras que los trabajadores de base continúan viendo como empeoran sus ingresos y condiciones laborales año tras año desde entonces, algunos 'miembros del UAW', incluido el propio Fain y cientos de otros dirigentes del UAW que ganan salarios de seis cifras, han visto aumentar su riqueza y sus carteras de acciones, no cabe duda de que hay no pocos millonarios en 'Solidarity House [sede central del sindicato]'. Son estos intereses sociales de la burocracia del UAW los que determinan su hostilidad hacia todas y cada una de las luchas de los trabajadores que amenazan las ganancias de las empresas. El aparato del UAW es un instrumento y un sicario de la dirección, no un representante de los trabajadores.

Un programa para hacer frente a las necesidades de los trabajadores

La Red de Comités de Base de los Trabajadores Automotores, que forma parte de la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base, basa sus demandas no en lo que los ejecutivos corporativos afirman que pueden pagar, sino en lo que los trabajadores necesitan para tener un nivel de vida digno.

Por lo tanto, presentamos la siguiente lista de demandas como la base necesaria para cualquier nuevo acuerdo en la industria automotriz:

  • ¡Ni un solo despido o cierre de planta! Los desarrollos en automatización y tecnología deben utilizarse para reducir la semana laboral, no para expulsar a los trabajadores de sus empleos y aumentar las ganancias. Si los vehículos eléctricos requieren menos horas de trabajo para construirse, entonces la semana laboral debe reducirse de las agotadoras 40, 50 e incluso 60 horas que los trabajadores trabajan rutinariamente a 30 horas a la semana sin pérdida de salario y el trabajo ser repartido entre todos los trabajadores.
  • Un aumento salarial general del 40 por ciento y la restauración de los aumentos del COLA (costo de vida), para compensar años de congelación salarial y los estragos causados por la alta inflación.
  • El fin de todas las escalas y esquemas salariales de 'progresión' al elevar inmediatamente los niveles inferiores a los salarios y beneficios más altos.
  • La transferencia de todos los trabajadores temporales y a tiempo parcial a la condición de tiempo completo, con salario completo y beneficios.
  • Financiación completa de las pensiones y de una atención médica de alta calidad para todos los trabajadores actuales y jubilados.
  • El restablecimiento de la jornada de ocho horas diarias con salarios que nos permitan mantenernos a nosotros mismos y a nuestras familias.
  • Control de las bases sobre la velocidad de la línea y los estándares de producción, que serán negociados por comités locales de base, para garantizar que la salud y la seguridad de los trabajadores sean lo primero.

La pregunta que enfrentan los trabajadores no es si, sino cómo se pueden ganar estas demandas.

La burocracia del UAW está promoviendo ilusiones de que los ejecutivos corporativos pueden ser presionados para hacer lo correcto, y que los intereses en los beneficios de las compañías pueden conciliarse con los intereses de los trabajadores.

Al mismo tiempo, el aparato sindical está tratando de apuntalar el apoyo al Partido Demócrata y convencer a los trabajadores de que se puede confiar en este gran partido empresarial. La denegación temporal del respaldo oficial por parte del UAW a la reelección de Biden no es más que un esfuerzo por hacer que su inevitable apoyo parezca haber sido ganado a cambio de compromisos falsos por parte del presidente para 'apoyar a los trabajadores' en la transición a los vehículos eléctricos.

Detrás de escena, el aparato del UAW está buscando apoyo estatal y corporativo para 'sindicar' a los trabajadores de las nuevas plantas de ensamblaje y baterías para vehículos eléctricos, con la esperanza de reforzar sus ingresos por cuotas. Contrariamente a las críticas demagógicas de Fain a los salarios de pobreza de los trabajadores de baterías de Ultium, el aparato del UAW está totalmente dispuesto a supervisar la proliferación de convenios separados y el recorte de los salarios en toda la industria de vehículos eléctricos, como lo ha hecho anteriormente en GM Subsystems y en otros lugares.

Planta de baterías GM-LG Ultium Cells en Lordstown, Ohio, donde el sueldo inicial es de $16.50.

Cualquier estrategia basada en 'presionar' a la dirección corporativa y a sus representantes en los partidos Demócrata y Republicano ha demostrado una y otra vez ser desastrosa para la clase obrera. Solo es necesario recordar que la última reestructuración devastadora de la industria automotriz a expensas de los trabajadores tuvo lugar en 2009 bajo la administración de Obama, con Biden como vicepresidente.

Entonces como ahora, las empresas, la Casa Blanca y la burocracia del UAW conspiraron para recortar los salarios de los trabajadores, destruir miles de empleos y cerrar plantas. Esta vez, sin embargo, lo que está en juego es aún mayor, ya que la administración Biden está tratando de utilizar las burocracias sindicales para disciplinar a la clase trabajadora, bloquear las huelgas y evitar que se desarrolle un movimiento obrero que interrumpiría los objetivos bélicos de Washington contra Rusia y China, que amenazan con convertirse en una nueva guerra mundial catastrófica.

Los principales tanques de batalla alemanes Leopard 2 en su camino a Ucrania. [Photo: Bundeswehr]

En la indicación más clara hasta ahora de las intenciones de la Casa Blanca de imponer las demandas de las compañías, la administración Biden ha recurrido a Gene Sperling, un alto dirigente del Partido Demócrata desde hace mucho tiempo, para coordinar su intervención en las conversaciones para el convenio con las Tres Grandes. Sperling es un experimentado enemigo de la clase trabajadora, que ha servido en el grupo de trabajo de la industria automotriz de Obama que redujo los salarios de todos los nuevos empleados a la mitad, además de desempeñar un papel clave en la bancarrota forzada de Detroit en 2013.

Los trabajadores automotrices ganarán esta pelea, no a través de apelaciones a los ejecutivos de las compañías o a los políticos afines a las grandes corporaciones, sino a través de una lucha de clases dura y contundente. Los aliados de los trabajadores no están en las salas de juntas corporativas o en los pasillos del Congreso, sino entre los millones de trabajadores en los Estados Unidos y en otros países que buscan luchar contra la explotación de las corporaciones, incluidos los 350,000 trabajadores de UPS cuyo contrato expira a fines de julio.

Para garantizar que el control de esta lucha esté en manos de los trabajadores, pedimos que se tomen las siguientes medidas:

  1. ¡No más conversaciones a puerta cerrada entre los dirigentes del UAW y la compañía! No hay razón para tener fe en las 'actualizaciones de las negociaciones' emitidas por el departamento de comunicaciones del UAW. Todas las conversaciones para el convenio deben transmitirse en vivo y ponerse bajo la supervisión de los trabajadores elegidos por las bases.
  2. Cualquier huelga debe llevarse a cabo al completo en las Tres Grandes. La noción de una 'empresa objetivo' en las conversaciones por el convenio es irremediablemente obsoleta, dado el carácter global de la industria automotriz y las complejas interconexiones de las cadenas de suministro. El aislamiento de una huelga en una sola compañía, como durante la huelga de GM de 2019, inevitablemente debilitará la posición de los trabajadores y dará a las empresas la ventaja.

    No necesitamos las impotentes 'campañas de convenios' llevadas a cabo por la burocracia del UAW, que son nada más que un show. Ya es hora de una huelga nacional e incluso internacional, que involucre a nuestros hermanos y hermanas en Canadá, México y más allá.
  3. El subsidio por huelga debe elevarse a 1.000 dólares por semana. El fondo de huelga del UAW, que asciende a $ 825 millones, ha sido utilizado durante décadas por la burocracia como un fondo ilícito para sus propios privilegios. Pero el fondo de huelga fue construido con el dinero de nuestras cuotas y debe usarse para proporcionar recursos adecuados para nuestras luchas.

Las elecciones del UAW de 2022

En los últimos dos años, han estallado una serie de rebeliones de los trabajadores automotrices. Desde Volvo Trucks, Dana Corp. y John Deere en 2021, hasta Ventra y Detroit Diesel en 2022, hasta Clarios en 2023, los trabajadores han rechazado una y otra vez los convenios respaldados por el UAW con la dirección, a menudo con un 90 por ciento o más de rechazo. En varios casos, como en Volvo, Dana, Deere y Clarios, los comités de base formados por trabajadores desempeñaron el papel fundamental para denunciar las mentiras de la administración y la burocracia del UAW y en la consolidación de la oposición a sus conspiraciones.

En las elecciones nacionales del UAW del año pasado, Will Lehman, un trabajador de base de Mack Trucks, luchó para dar voz y un programa consciente a esta rebelión en desarrollo.

Will Lehman

Lehman, un socialista, se postuló para presidente del UAW, pidiendo medidas que pondrían todo el poder y la toma de decisiones en manos de los trabajadores en los talleres y otros lugares de trabajo, incluyendo:

  1. No la reforma de la actual burocracia, sino su abolición.
  2. El fin de todos los organismos corporativos del UAW, incluidos los 'centros de capacitación' conjuntos que sirven nada más que como fondos ilícitos para el aparato.
  3. Control total de las bases sobre todos los activos del UAW, junto con las negociaciones y el recuento de votos.
  4. Un programa para luchar por lo que los trabajadores necesitan, no por lo que las corporaciones dicen que es aceptable.

Junto con estas demandas, Lehman se postuló como partidario de la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base (AIO-CB), pidiendo a los trabajadores que adopten una perspectiva y estrategia internacional en oposición al nacionalismo promovido por todas las secciones de la burocracia del UAW.

Trabajadores muestran su apoyo a Will Lehman para presidente del UAW

El aparato del UAW, junto con el monitor UAW nominalmente encargado de supervisar el sindicato y erradicar la corrupción, respondieron tratando de reducir la participación en las primeras elecciones directas nacionales del sindicato tanto como fuera posible. La participación en la primera vuelta del otoño pasado fue abismalmente baja del 9 por ciento, con solo 104.776 votos emitidos de 1.1 millones de miembros activos y retirados, y apenas fue mayor en la segunda vuelta. Decenas, si no cientos, de miles de trabajadores simplemente nunca fueron informados de que había una elección o no se les dio una papeleta.

Los bufetes de abogados corporativos que componen el 'monitor UAW', Jenner & Block y Crowell & Moring, trabajaron para encubrir las actividades antidemocráticas de la burocracia. Como descubrió la campaña de Lehman, los bufetes de abogados del monitor eran el lugar donde se dirimían descarados conflictos de intereses.: Jenner & Block se ha desempeñado como representante legal de GM durante décadas, mientras que Crowell & Moring ha representado a compañías como GM, Daimler, Caterpillar, Dana y otras.

Fain finalmente prestó juramento como presidente del UAW en marzo después de ganar solo el 3 por ciento de los votos de los trabajadores de base. Buscando encubrir las bases ilegítimas de su presidencia, Fain y el UAWD prácticamente han ocultado la evidencia de la privación sistemática del derecho al voto en las elecciones, yendo en contra de todas sus declaraciones de restaurar la 'democracia' y la 'transparencia' en el sindicato.

Mientras tanto, la administración Biden y el estado han trabajado para apuntalar el apoyo a Fain y presentar las elecciones fraudulentas del UAW como legítimas. A fines de junio, el Departamento de Trabajo rechazó una queja presentada por Lehman, sin proporcionar ninguna explicación de su negación o respuesta a la evidencia de eliminación de votantes que Lehman había compilado. Por segunda vez, Lehman ha acudido a los tribunales en defensa de los derechos de las bases, presentando una demanda contra el Departamento de Trabajo, exigiendo una repetición de las elecciones en las que todos los miembros del UAW reciban un aviso adecuado.

La lucha por el poder de las bases y la unidad internacional

El poder social sin explotar de la clase obrera es mucho mayor que nunca antes en la historia. La administración corporativa y sus representantes políticos son despiadados, sí, pero también están profundamente asustados por la creciente posibilidad de una ola de huelgas coordinada internacionalmente y un movimiento de la clase trabajadora.

La gente se reúne durante una protesta en apoyo de la sanidad pública en la plaza Cibeles en el centro de Madrid, España, el domingo 13 de noviembre de 2022. [AP Photo/Manu Fernandez]

En particular desde 2019, los trabajadores buscaron repetidamente vincular sus luchas a través de las fronteras en rebelión contra las burocracias sindicales nacionalistas. De la explosiva serie de huelgas salvajes, que finalmente englobaron a más de 70,000 trabajadores fabricantes de piezas de automóvil, que estallaron en Matamoros, México, en enero-febrero de 2019; a la valiente negativa de los trabajadores del complejo de ensamblaje de GM en Silao, México, a aumentar la producción y socavar así la huelga de GM en los Estados Unidos.; a las huelgas salvajes en respuesta al COVID-19 que cerraron plantas automotrices en Italia, España, Canadá y los EE. UU. en marzo de 2020; a la acción laboral espontánea de los trabajadores de Volvo en Bélgica en respuesta a la huelga de Volvo Trucks de 2021.

El potencial objetivo de los trabajadores para coordinar sus luchas en todo el mundo es enorme. Con el uso de teléfonos inteligentes, redes sociales, herramientas de traducción automática y otras tecnologías, los trabajadores pueden comunicarse instantáneamente con sus hermanos y hermanas de clase en prácticamente cualquier otro país. En todo el mundo, la clase obrera está conectada en una vasta red de producción, mientras enfrenta problemas similares y es explotada por el mismo puñado de empresas transnacionales.

La Alianza Internacional Obrera de los Comités de Base (AIO-CB) está luchando para proporcionar una organización mundial para los trabajadores para que estos puedan aprovechar su fuerza potencial, liberarse del dominio de las burocracias sindicales y elaborar un plan de acción común a través de plantas, empresas, industrias y fronteras nacionales. Está uniendo no solo a los trabajadores automotrices, sino también a los trabajadores postales, educadores, trabajadores de tránsito, trabajadores ferroviarios y otros sectores de la clase trabajadora, en una lucha contra la desigualdad y la guerra imperialista.

No hay tiempo que perder. Las empresas y las burocracias sindicales ya están planeando cómo derrotar a los trabajadores automotrices en la próxima batalla. Los trabajadores debemos elaborar nuestra propia estrategia y organización de manera sistemática e incansable.

Únete hoy para convertirse en delegado de la red de comités de base de trabajadores automotrices y la AIO-CB. Romperemos las barreras artificiales de raza, nacionalidad y otras divisiones impuestas a los trabajadores por las corporaciones y las burocracias sindicales y vincularemos a todos aquellos trabajadores que buscan luchar por sus intereses comunes. Le ayudaremos a crear comités de base en su lugar de trabajo y le proporcionaremos un medio para comunicarse y compartir información con los trabajadores en otros lugares.

El resultado de esta lucha depende de lo que los trabajadores decidan hacer. ¡Toma la decisión de unirte al movimiento por el poder de las bases!

(Publicado originalmente en inglés el 12 de julio de 2023)

Loading