Mientras Ucrania proseguía el miércoles por segundo día consecutivo los ataques con drones y los bombardeos de artillería sobre territorio ruso, el presidente francés, Emanuel Macron, se mostró partidario de que Ucrania siga un 'camino' para unirse a la alianza militar de la OTAN.

El martes, ocho drones explosivos fueron lanzados contra Moscú, la capital de Rusia, dañando un complejo de apartamentos. Fue el segundo ataque ucraniano con drones contra Moscú desde el inicio de la guerra.

Los ataques continuaron el miércoles con una serie de ataques con drones contra dos refinerías de petróleo en la región rusa de Krasnodar y el bombardeo de la región rusa de Belgorod, cerca de la frontera con Ucrania. El martes, el gobernador de Belgorod, Viacheslav Gladkov, declaró que los bombardeos habían causado un muerto y cuatro heridos. Los bombardeos continuaron el miércoles.

En respuesta a los ataques del martes, las autoridades estadounidenses y británicas se retractaron de sus declaraciones anteriores de que no apoyaban los ataques ucranianos dentro de Rusia.

El ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, James Cleverly, afirmó que Ucrania tenía 'derecho a proyectar fuerzas más allá de sus fronteras' y que tales ataques están 'reconocidos internacionalmente como legítimos en el marco de la autodefensa de una nación'.

Comentando la respuesta de Estados Unidos y Reino Unido, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que Rusia 'habría preferido escuchar al menos algunas palabras de condena' de los ataques.

Los ataques dentro de Rusia se producen después de que Estados Unidos anunciara en la Cumbre del G7 del 19 de mayo que permitiría a sus aliados de la OTAN enviar cazas F-16 a Ucrania, y de que el Reino Unido anunciara a principios de mayo que enviaría misiles de largo alcance a Ucrania.

Aunque Estados Unidos había afirmado anteriormente que no 'alentaba ni permitía' ataques dentro de Rusia, cada vez está más claro que los aviones de combate y los misiles de largo alcance se suministran con el objetivo de atacar en lo más profundo del territorio controlado por Rusia, o incluso dentro de la propia Rusia.

Los ataques siguen a las incursiones de la semana pasada de fuerzas de extrema derecha alineadas con Ucrania, que llevaron a cabo incursiones en el interior del territorio de Belgorod utilizando vehículos suministrados por Estados Unidos.

En un discurso pronunciado el miércoles en Eslovaquia, el presidente francés, Emanuel Macron, pidió que se proporcionen a Ucrania garantías de seguridad 'tangibles y creíbles'.

Macron dijo que 'si queremos mantenernos frente a Rusia... debemos dar a Ucrania los medios para prevenir cualquier nueva agresión e incluir a Ucrania en cualquier nueva arquitectura de seguridad'.

El presidente francés se mostró partidario de una 'vía' hacia la adhesión de Ucrania a la OTAN.

Comentando el anuncio, el Financial Times escribió que 'el llamamiento de Macron a favor de un 'camino hacia' la adhesión de Ucrania a la OTAN también representa un cambio de posición para Francia, que junto con Alemania y Estados Unidos se había opuesto a principios de este año a las demandas del Reino Unido, Polonia y otros miembros de Europa del Este de ofrecer a Ucrania algún tipo de 'camino' tangible hacia la adhesión en la cumbre de julio'.

Macron dijo que las discusiones sobre la adhesión de Ucrania estaban en curso y que sería un tema importante en la cumbre de la OTAN en Lituania en julio.

En abril, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, declaró que 'el lugar que le corresponde a Ucrania está en la OTAN', y añadió: 'Todos los aliados de la OTAN han acordado que Ucrania se convierta en miembro'.

El miércoles, Estados Unidos anunció otro gasto de 300 millones de dólares en armamento para la guerra de Ucrania, incluida artillería y misiles de largo alcance. Alemania, por su parte, anunció el miércoles el cierre de cuatro de los cinco consulados rusos en Alemania.

El miércoles y el jueves, los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN se reúnen en Oslo (Noruega) para debatir el avance de la adhesión de Suecia a la alianza militar. A principios de esta semana, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, visitó Suecia para pedir también su ingreso en la alianza.

El ritmo acelerado de los ataques dentro de Rusia, la creciente franqueza con que estos ataques son acogidos por EE.UU. y otros miembros de la OTAN, la rápida expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia y las conversaciones abiertas sobre el ingreso de Ucrania en la OTAN apuntan a la escalada y transformación de la guerra en un conflicto directo entre la OTAN y Rusia.

(Publicado originalmente en inglés el de junio de 2023)