Mientras la administración de Biden abandona la menor pretensión de detener la propagación de COVID-19, la Casa Blanca y los medios de comunicación corporativos han adoptado un nuevo lema para justificar la infección en masa de la población: La variante ómicron que está abrumando a los hospitales y asesinando a cientos de estadounidenses diariamente es “moderada”.
“Un caso de COVID-19 para una persona vacunada completamente y reforzada probablemente significará ningunos síntomas o síntomas moderados semejantes a virus respiratorios comunes”, dijo presidente estadounidense Joe Biden el 21 de diciembre, y así esencialmente equipara la pandemia que ha acabado con la vida de 855.000 estadounidenses con el resfriado común.
Ómicron resultará en “legiones de casos asintomáticos, moderados y no probados” escribe ejecutivo financiero Rob Arnott en una columna en el Wall Street Journal, que le lleva a preguntar, sin ironía, “¿Debo intentar infectarme de la variante ómicron de Covid para avanzar la causa de inmunidad colectiva?”
“La variante ómicron es más moderada”, declara David Leonhardt en una columna del New York Times publicada el miércoles, que emplea la palabra “moderado” ocho veces.
“Ya que es más moderada que las versiones tempranas del virus, Covid parece ser un peligro menos amenazante a la mayoría de gente vacunada de mayor edad que la gripe anual”, dice Leonhardt, y añade, “Covid cada vez más se parece al tipo de riesgo de salud que la gente acepta cada día”.
Todo esto, sin embargo, es, según Maria Van Kerkhove, la líder técnica de la respuesta de COVID-19 de la Organización de Salud Mundial, desinformación “peligrosa”.
“Sugerir que ómicron es ‘simplemente una moderada’ enfermedad es peligrosa”, dijo Van Kerkhove. “Los números de casos son asombrosos… incluso con menos riesgo, veremos los hospitales abrumados.
“Ómicron no es moderada. micron no es el resfriado común. Y esa retórica que hay allá afuera, la narrativa que hay allá afuera, es peligrosa y es mortal.
“Ómicron y delta están infectando a individuos, están poniendo a la gente en hospitales, y si hay un número de casos grande, habrá hospitalización aumentada.
“Este virus, ómicron, alcanzará las poblaciones vulnerables, alcanzará las poblaciones de mayor edad, significará un aumento de muertes entre estos individuos. Entonces sugerir que ómicron es simplemente una infección moderada, es simplemente muy peligroso”.
“Nuevo año, nueva delusión. ‘Es moderada’. No hay sentido desde arriba hasta abajo”, suspiró virólogo Kristian G. Anderson, y comparó la desinformación sin fin sobre COVID-19 con una regresión infinita.
Como señaló bióloga de desarrollo Malgorzata Gasperowicz hace más de un mes, “Un virus que se propaga más rápido, incluso si sea más moderada, podría causar muchas muertes más”. Pero ómicron “no es moderada” porque “La transmisión. Es. Lo más importante”. Y ómicron es masivamente transmisible.
Sus advertencias se han demostrado catastróficamente correctas por la propagación de la infección:
- El jueves, había 126.000 pacientes con COVID-19 hospitalizados en los Estados Unidos.
- Para el fin del día de hoy, el número de gente hospitalizada excederá el nivel más alto de antes. Hospitales abrumados están cancelando procedimientos electivos y están dando de alta prematuramente a pacientes enfermos, mientras los que vienen a las salas de emergencia tienen que esperar durante horas.
- Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades predice que, durante el próximo mes, el número de víctimas disparará rápidamente, y alcanzará 3.500 por día para el fin de enero–cerca del nivel más alto desde que inició la pandemia.
- Hospitalizaciones de niños por COVID-19 han aumentado, con 672 niños hospitalizados cada día en los Estados Unidos, más de doble el número de la semana pasada.
- No hay ninguna indicación de que ómicron involucre una reducción en la incidencia de COVID a largo plazo, algo que potencialmente significa que millones de personas se encontrarán debilitadas durante meses, años, o el resto de la vida.
La realidad es que el uso del término “moderado” para describir el COVID-19 no proviene del léxico de científicos que estudian la enfermedad, sino de la industria publicitaria.
La Administración de Medicamentos y Alimentos estadounidense durante mucho tiempo ha advertido que “Productos con tabaco que tienen la marca del” término “moderado…engañan al público hasta que piensen que estos productos causen menos riesgos de salud que otros cigarrillos. Sin embargo, todavía son un riesgo de salud grave”.
La técnica empleada por las compañías de tabaco gigantes para vender la muerte en la forma de cigarrillos ahora ha sido empleada por los medios y el gobierno federal para vender la muerte en la forma de la enfermedad masiva.
Hay ciertos tropos usados por los medios de comunicación estadounidenses para hacer que lo inhumano y lo inmoral se parezcan familiares y ordinarios. La interrogación “mejorada”. El asesinato 'con objetivo”. Milicias “moderadas” vinculadas con Al-Qaeda que son promovidas por EUA en Siria.
Ahora, también, el poder enorme de los medios estadounidenses se ha empleado para hacer que la población acepte la muerte en escala masiva. Un artículo por Ezekiel Emanuel, cuyo momento famoso anterior fue su declaración de que “la sociedad sería mejor” si la gente no vivía más allá de 75 años, afirma que el gobierno no debe molestarse con contar las muertes por COVID-19.
Pero pese a la manipulación sin fin, pese a las mentiras y encubrimientos sin número, la pandemia es real. Cerca de un millón de personas están muertas sólo en los Estados Unidos. Y cientos de miles más se morirán a menos que ocurra la acción urgente.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 6 de enero de 2022)