Una patrullera rusa realizó ayer un disparo de advertencia contra el destructor británico HMS Defender frente a la costa de Crimea. A continuación, lanzó bombas de fragmentación OFAB-250 de alto poder explosivo en la trayectoria del buque británico.

Según el Ministerio de Defensa ruso, el HMS Defender hizo una incursión de 3 kilómetros en aguas territoriales rusas frente al cabo Fiolent, en el sur de Crimea. Crimea, una península en el Mar Negro, fue anexionada por Rusia en marzo de 2014, tras un golpe de Estado de extrema derecha apoyado por Estados Unidos en Kiev, la capital de Ucrania.

El incidente comenzó con una gran provocación militar y política por parte del Reino Unido. El HMS Defender acababa de salir de Odessa, en el sur de Ucrania, y estaba realizando ejercicios con una fragata de la Marina Real de los Países Bajos, la HNLMS Evertsen. El Financial Times informó el miércoles de que "funcionarios británicos y ucranianos se reunieron a bordo del destructor el martes para acordar un acuerdo de defensa en el que el Reino Unido ayudará a impulsar las capacidades navales de Kiev. La cooperación incluirá la formación del personal de la marina ucraniana, la creación de nuevas bases navales y la compra de dos cazaminas de la clase Sandown".

Un comunicado del canal de televisión del ministerio ruso, Zvezda, dijo sobre el incidente: "La Flota del Mar Negro, junto con el FSB (servicio de seguridad), detuvo una violación de la frontera rusa por parte de un destructor británico, Defender.

"Hoy, a las 11:52, el Defender cruzó la frontera estatal de Rusia en la parte noroeste del Mar Negro. Entró en las aguas territoriales a lo largo de tres kilómetros, en la zona del Cabo Fiolent...

"A las 12:06 y a las 12:08, un barco ruso de patrulla fronteriza hizo un disparo de advertencia. A las 12:19, los aviones Su-24M de la Flota del Mar Negro realizaron un bombardeo de advertencia, lanzando 4 bombas OFAB-250 sobre el rumbo del destructor".

"A las 12:23 el destructor británico abandonó los límites del mar territorial de Rusia".

Claramente sorprendido por la rápida y agresiva respuesta de Rusia, el Ministerio de Defensa declaró: "El buque de la Royal Navy está llevando a cabo un paso inocente a través de las aguas territoriales de Ucrania de acuerdo con el derecho internacional. Creemos que los rusos estaban realizando un ejercicio de artillería en el Mar Negro y avisaron a la comunidad marítima de su actividad. No hubo disparos contra el HMS Defender y no reconocemos la afirmación de que se lanzaron bombas a su paso".

Este desmentido fue refutado por el corresponsal de Defensa de la BBC, Jonathan Beale, que habló desde el HMS Defender, y que hizo una declaración que se subió al sitio de noticias de la BBC como archivo de sonido, y en los comentarios incluidos en una actualización de noticias adjunta.

Beale escribió: "Dos buques guardacostas rusos que seguían al buque de guerra de la Royal Navy [HMS Defender], trataron de obligarlo a alterar su rumbo. En un momento dado, uno de los buques rusos se acercó a unos 100 metros (328 pies).

"Se emitieron advertencias cada vez más hostiles a través de la radio, incluyendo una que decía 'si no cambias el rumbo, dispararé'..."

En una grabación de tan sólo 99 segundos de duración, a los 23 segundos se oye el rugido de los motores de un avión de la fuerza aérea rusa, durante más de 10 segundos, lo que obligó a Beale a exclamar "es otro avión ruso zumbando el buque de guerra, sí, en el Mar Negro. A veces ha habido más de 20 aviones sobre el buque de guerra. Y ha habido avisos de buques guardacostas rusos y, de hecho, hemos oído disparos. Creemos que estaban fuera de alcance".

Una sección del informe de Beale que fue retirada a los pocos minutos de ser publicada en el sitio de la BBC revela lo tenso de la situación: "En un momento dado, [los marineros a bordo del HMS Defender] se pusieron máscaras antifuego para proteger sus rostros, por si acaso iba a haber un intercambio de disparos... No pensaron que fuera a ocurrir y no ocurrió. Pero los aviones rusos se interesaron por esto y habían advertido al barco que no entrara en aguas territoriales de Crimea, alegando que son aguas rusas".

Que los acontecimientos tomaran este rumbo no fue casualidad, dada la misión de provocación que está llevando a cabo el Reino Unido en la región. Como señala Beale en su informe, "la tripulación ya estaba en puestos de acción al acercarse al extremo sur de la Crimea ocupada por Rusia. Los sistemas de armamento a bordo del destructor de la Royal Navy ya habían sido cargados. Se trataría de una maniobra deliberada para hacer notar a Rusia".

El incidente con el HMS Defender debe verse en el contexto de un aumento del militarismo por parte del imperialismo británico y sus socios de la OTAN, con Moscú y China en el punto de mira.

El HMS Defender, un destructor de tipo 45 diseñado principalmente para la guerra antiaérea y antimisiles, es uno de los varios buques de guerra —junto con aviones de guerra, submarinos, soldados y marineros del Reino Unido y de Estados Unidos— que están formando un "anillo de acero" alrededor de uno de los dos nuevos portaaviones del Reino Unido, el HMS Queen Elizabeth, que está en su primer despliegue operativo.

El Grupo de Ataque de Portaaviones 21 (CSG21) partió del Reino Unido el mes pasado en un viaje de seis meses a la región del Indo-Pacífico. El CSG21 fue descrito por el Ministerio de Defensa (MoD) el martes, apenas 24 horas antes del incidente del Mar Negro, como "la mayor concentración de poder marítimo y aéreo que sale del Reino Unido en una generación..."

El martes, reveló el MoD, los aviones de guerra, incluidos los jets F35B del Reino Unido y de Estados Unidos, "realizaron salidas operativas por primera vez desde el HMS Queen Elizabeth en apoyo de la Operación Shader y la Operación Inherent Resolve de Estados Unidos".

La declaración belicosa continuó: "Para el grupo de tareas, que ha pasado las semanas anteriores en el Mediterráneo trabajando con los aliados y socios de la OTAN, marca un cambio de énfasis. De los ejercicios y compromisos internacionales, el Carrier Strike Group está ahora entregando todo su poderío naval y aéreo..."

La Operación Inherent Resolve y la Operación Shader son los nombres en clave de las intervenciones militares de Estados Unidos y Gran Bretaña, creadas en 2014 aparentemente para atacar al Estado Islámico, que consisten principalmente en constantes ataques aéreos y misiones de vigilancia hostil en una serie de países como Irak, Siria, Libia, Túnez y Líbano.

El comunicado del Ministerio de Defensa citó al capitán James Blackmore, comandante del Ala Aérea del Portaaviones, quien señaló la importancia de las operaciones de bombardeo dirigidas por la Royal Navy: "esta vez" los aviones de guerra del Reino Unido estaban "volando desde un portaaviones en el mar, lo que marca el regreso de la Royal Navy a las operaciones de ataque marítimo por primera vez desde la campaña de Libia hace una década".

La provocación en el Mar Negro, como todas las operaciones del CSG21, no podía llevarse a cabo sin el visto bueno de Estados Unidos. La semana pasada, el HMS Defender realizó ejercicios en el Mar Negro junto a un buque destructor estadounidense y una fragata holandesa. Blackmore destacó el papel integral de las fuerzas estadounidenses en los ataques militares del martes: "Esta es también la primera misión de combate llevada a cabo por aviones estadounidenses desde un portaaviones extranjero desde el HMS Victorious en el Pacífico Sur en 1943. El nivel de integración entre la Royal Navy, la Royal Air Force y el Cuerpo de Marines de EE.UU. es realmente perfecto, y demuestra lo unidos que estamos desde que nos embarcamos juntos por primera vez el pasado mes de octubre".

El informe del FT sobre el intercambio en el Mar Negro citaba a Mark Galeotti, miembro asociado del Royal United Services Institute: "Moscú 'estaba tratando de mostrar que no va a ser presionado' por acciones 'provocativas' como el viaje del HMS Defender. Los británicos suelen desempeñar este papel como representantes: [los rusos] no quieren ser demasiado agresivos contra los estadounidenses [...] así que existe la sensación de que lo hacen contra los británicos porque no es tan peligroso", dijo.

El Ministerio de Defensa anunció en mayo que el CSG21 "participará en ejercicios de la OTAN como el ejercicio Steadfast Defender y prestará apoyo a la operación Sea Guardian de la OTAN y a las operaciones de seguridad marítima en el Mar Negro".

Poco antes de que el Carrier Strike Group partiera del Reino Unido, fuentes del Ministerio de Defensa revelaron que el HMS Defender se "separaría" en el Mediterráneo de la fuerza principal y se dirigiría a través del Bósforo "para llevar a cabo su propio conjunto de misiones en el Mar Negro".

El 10 de junio, la Royal Navy dijo que durante varias semanas el HMS Defender había "completado un entrenamiento intensivo y trabajado en la Operación Sea Guardian, la misión de la OTAN en el Mediterráneo para disuadir y combatir el terrorismo". El HMS Defender "se dirigirá al Mar Negro tras una parada en Estambul". La Royal Navy dijo: "El Defender está ahora en Estambul con la fragata holandesa HNLMS Evertsen... y recibirá a representantes del gobierno turco, del mundo empresarial, de las fuerzas armadas y del sector de la defensa durante su estancia allí".

Las operaciones antirrusas de la OTAN se intensificarán en los próximos días, con sus ejercicios militares anuales Sea Breeze que tendrán lugar en la región del Mar Negro del 28 de junio al 10 de julio.

Al anunciar la operación, la Embajada de EE.UU. en Ucrania dijo: "La iteración de este año implica el mayor número de naciones participantes en la historia del ejercicio, incluyendo 32 países de seis continentes, 5.000 tropas, 32 barcos, 40 aviones y 18 equipos de operaciones especiales y de buceo". Se "centrará en múltiples áreas de guerra, incluyendo la guerra anfibia, la guerra de maniobras terrestres, las operaciones de buceo, las operaciones de interdicción marítima, la defensa aérea, la integración de operaciones especiales, la guerra antisubmarina y las operaciones de búsqueda y rescate".

El incidente del miércoles en el Mar Negro es un claro indicio de cómo el conflicto entre Ucrania y Rusia y los intereses de las potencias imperialistas que compiten entre sí han transformado toda la región en un polvorín que podría encender una conflagración mundial. El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, tuiteó que el disparo de Rusia contra el buque de guerra británico era "una clara prueba de la posición de Ucrania: Las acciones agresivas y provocadoras de Rusia en los mares Negro y de Azov, su ocupación y militarización de Crimea suponen una amenaza duradera para Ucrania y sus aliados. Necesitamos una nueva calidad de cooperación entre Ucrania y los aliados de la OTAN en el Mar Negro".

(Artículo publicado originalmente en inglés el 23 de junio de 2021)