Después de décadas de ataques bipartidistas, la educación pública como institución social dentro de los EE.UU. se encuentra en una grave crisis. Decenas de miles de profesores y personal han recibido avisos de despido solo este año, las escuelas están cerrando por decenas y programas vitales están siendo eliminados a medida que los distritos se tambalean con grandes déficits presupuestarios. Con la administración entrante de Trump y la selección de Linda McMahon como Secretaria de Educación, las escuelas públicas enfrentan una amenaza existencial.

Randi Weingarten, presidenta de la Federación Estadounidense de Profesores (AFT), y Becky Pringle, presidenta de la Asociación Nacional de Educación (NEA), han seguido minimizando el carácter fascista de la administración entrante de Trump.

Después de la elección de Trump, ambas burócratas sindicales hicieron llamamientos a la unidad. Más recientemente, se mostraron entusiastas sobre la elección de Trump para secretaria de Trabajo, Lori Chavez-DeRemer, de quien afirmaron que tenía un historial a favor de los trabajadores y de la educación pública.

Dado que la selección de McMahon ha provocado una preocupación y un enfado generalizados entre los educadores, la presidenta de la AFT, en particular, ha señalado su voluntad de colaborar con la candidata de Trump. En una reciente entrevista con MSNBC, Weingarten dijo de McMahon: 'La gente se sorprendió de que estuviera adoptando una actitud reservada de 'esperar y ver'. … Quiero decir que ella quiso ser maestra una vez. Y sirvió en la Junta de Educación de Connecticut durante un año.”

De hecho, McMahon es una multimilmillonaria y fiel seguidora de Trump, que hizo su fortuna como alta ejecutiva del World Wrestling Entertainment (WWE). Después de servir en el primer mandato de Trump como jefa de la Administración de Pequeñas Empresas, McMahon fundó el America First Policy Institute (AFPI) después de la derrota de Trump en las elecciones de 2020. Uno de los principales cofundadores del AFPI fue el multimillonario petrolero y pastor nacionalista cristiano Tim Dunn, un violento opositor a la separación de la Iglesia y el Estado, garantizada por la Constitución de los Estados Unidos.

El AFPI es un grupo de expertos de extrema derecha, que ha estado produciendo políticas conservadoras y partidarios leales de la agenda de Trump. McMahon actualmente es presidente de la junta directiva del AFPI y presidenta de su Centro para el Trabajador Estadounidense. Ella misma una ferviente defensora de la elección de escuela y los llamados 'derechos de los padres', el papel principal de McMahon como Secretaria de Educación será destripar por completo la educación pública, como se describe en el Centro de Oportunidades Educativas del AFPI y el Centro para 1776.

Weingarten recientemente elogió la publicación en X de McMahon que apoya los programas de aprendizaje en las escuelas de Suiza, pidiendo a los EE. UU. que implementen programas similares. Esta es la razón por la que 'nuestro sindicato' está adoptando un enfoque de 'esperar y ver', declaró Weingarten.

En su propia publicación en X, Weingarten declaró: “Los estudiantes y educadores necesitan que nos concentremos en las trayectorias profesionales y los programas CTE (Educación Profesional y Técnica). En eso se ha centrado AFT a través de asociaciones como nuestro trabajo con Micron. Hay mucho que se puede hacer en esto. Invito a Linda McMahon y a todos los que quieran trabajar juntos a unirse a nosotros.”

En particular, una de las principales prioridades del AFPI para la educación pública es alentar a los estados a reformar los estándares de graduación en la escuela secundaria para canalizar a más jóvenes hacia el alistamiento militar y la capacitación basada en habilidades para la colocación directa en el mundo laboral.

La AFT ha estado apoyando activamente el camino de la escuela a la fábrica. Su último proyecto incluye una asociación entre Micron Technology y las escuelas del estado de Nueva York para enviar a los estudiantes de secundaria a la industria de los semiconductores de alta tecnología. Esto corresponde a las necesidades más profundas del capitalismo estadounidense, que está en una feroz competencia con China por los semiconductores y otras industrias críticas de alta tecnología necesarias para el uso comercial y militar.

La burocracia de la AFL-CIO, a la que el presidente Biden se refirió como su 'OTAN interna', ha desempeñado un papel fundamental en la supresión de la oposición de la clase trabajadora a la transformación de la economía y la estructura política de Estados Unidos para una 'guerra total' contra Irán, Rusia y China.

Esto implicará grandes recortes en el gasto social y el desvío de recursos públicos a las necesidades de la guerra y un mayor enriquecimiento de la oligarquía corporativa y financiera. Biden destinó más de 280 mil millones de dólares para la producción e investigación de semiconductores bajo su Ley CHIPS y de Ciencia, que fue precisamente la fuente de financiamiento para la asociación de Weingarten con Micron. Las guerras del imperialismo estadounidense por la dominación global solo se intensificarán bajo la administración de Trump.

En una entrevista con MSNBC, Weingarten aclaró aún más estos objetivos, diciendo que 'esta es la razón por la que se necesita un Departamento de Educación federal, por qué se necesita un Departamento de Trabajo federal que trabaje con el Departamento de Comercio federal, para que realmente podamos crear estos conductos para asegurarnos de que los niños, no las escuelas, sino los niños, tengan opciones en términos de lo que quieren hacer en el futuro'.

En otras palabras, Weingarten está ofreciendo sus servicios como sargento de reclutamiento para el Pentágono y las empresas estadounidenses. Insiste en que se debe desalentar a los jóvenes de perseguir sus intereses intelectuales y profesionales a través de la educación superior y, en cambio, se les debe incorporar rápidamente a la fuerza laboral o al ejército.

La presidenta de la AFT también señaló su apoyo a los planes de Trump de cerrar el Departamento de Educación que tiene medio siglo de antigüedad. A mis afiliados realmente no les importa si tienen una burocracia del Departamento de Educación o no', dijo a MSNBC.

Hablando esta semana en el programa de radio Hard Knock Radio de KPFA sobre la amenaza de eliminar la agencia federal, Weingarten declaró: “[¿A] quién le importa cómo se ve la burocracia? A mí me importa la función”.

Weingarten está más que dispuesta a trabajar con los fascistas entrantes en la Casa Blanca, siempre y cuando la burocracia de la AFT tenga un 'asiento en la mesa' y pueda proteger sus vastos intereses institucionales y financieros.

Weingarten no es ajena a trabajar con este tipo de fuerzas de ultraderecha. Durante la última presidencia de Trump, Weingarten mantuvo una reunión secreta con el neofascista y leal a Trump Steve Bannon en 2017. En 2021, Weingarten coorganizó una reunión pública con el grupo de padres de extrema derecha Open Schools USA, en la que se respaldaron las políticas de inmunidad colectiva. El panel contó con la participación del Dr. Jay Bhattacharya, minimizador del COVID y recientemente nominado por Trump para dirigir los Institutos Nacionales de Salud (NIH).

En un viaje destinado a promover la guerra por delegación entre Estados Unidos y la OTAN contra Rusia, Weingarten recorrió Ucrania en 2022 para encubrir el papel del fascismo ucraniano durante el Holocausto, y se reunió con el alcalde de Leópolis, Andriy Sadovyi, un abierto partidario del fascista Stepan Bandera. Weingarten ha seguido defendiendo el 'derecho de Israel a defenderse', promoviendo la afirmación mentirosa de que los manifestantes antigenocidio son 'antisemitas', y apoya el pleno respaldo de Washington a la guerra de exterminio de Netanyahu contra los palestinos.

Asociación Nacional de Educación

La presidenta de la NEA, Becky Pringle, ha adoptado un enfoque algo diferente para la selección de McMahon. En un comunicado oficial, Pringle pidió al Senado que rechace su selección como secretaria de Educación. En X, fingió oposición a McMahon, publicando: “Los estudiantes merecen algo mejor que una Secretaria de Educación extrema e incompetente. Al seleccionar a Linda McMahon, Donald Trump demuestra que no podría importarle menos el futuro de nuestros estudiantes. En lugar de fortalecer las escuelas de nuestra nación, Donald Trump ha elegido a Betsy DeVos 2.0.

Pringle y la burocracia de la NEA no están fundamentalmente en desacuerdo con la revisión corporativa de la educación pública. Al igual que la AFT, la NEA tiene un sórdido historial de apoyo a los diversos planes de 'reforma escolar' y privatización bajo los presidentes demócratas Clinton y Obama. Los sindicatos de maestros firmaron la opción de escuela y 'organizaron' las escuelas chárter (concertadas o incentivadas) para compensar la pérdida de dinero de las cuotas por el cierre de las escuelas públicas y los despidos masivos de maestros.

En los años transcurridos desde la última presidencia de Trump, las burocracias sindicales de los profesores han buscado sistemáticamente suprimir y aislar las luchas de los maestros y trabajadores escolares, como lo hicieron durante la explosiva ola de huelgas salvajes en Virginia Occidental, Oklahoma, Arizona y otros estados en 2018-2019. Además, a lo largo de la pandemia, mientras profesores, padres y estudiantes luchaban contra la reapertura insegura de las escuelas, Pringle y Weingarten, llevando a cabo los intereses de Wall Street, obligaron a los profesores y estudiantes a regresar a las aulas infectadas, para que los padres pudieran volver a trabajar.

Con una afiliación conjunta de 4,8 millones de miembros, Pringle y Weingarten dirigen dos de los sindicatos más grandes de los Estados Unidos. A pesar de esto, no tienen ningún interés en librar una lucha genuina contra las políticas fascistas de Trump. Lo que los burócratas y la élite gobernante temen, por encima de todo, es el surgimiento de un movimiento independiente de la clase obrera que se libere de su control.

Grandes huelgas y protestas han estallado ante los actuales ataques a los niveles de vida y los recursos para la educación pública, como lo demuestran las recientes huelgas de maestros en Massachusetts y la huelga en curso de maestros en Albany, Oregón. Profesores, estudiantes y padres se han manifestado enérgicamente para protestar contra los cierres masivos de escuelas y los recortes en todo Estados Unidos, sobre todo en San Francisco, Seattle, Oakland, Pittsburgh, Chicago, Albuquerque y otros lugares. La oposición a estos recortes presupuestarios no hará más que intensificarse.

Es por eso que, en condiciones de un asalto monumental a los niveles de vida y los derechos democráticos de maestros y estudiantes, Weingarten y Pringle han llamado a la 'construcción de coaliciones' y a la organización de 'base'. Son conscientes de que la elección de Trump fue el resultado de un colapso masivo del apoyo de la clase obrera a los demócratas, que hace tiempo que abandonaron cualquier política de reforma social y están metidos hasta el cuello en guerras interminables.

Temiendo, con razón, que la próxima explosión de oposición a las políticas de Trump cree las condiciones para que los socialistas obtengan apoyo popular para la lucha por la independencia política de la clase trabajadora y una alternativa socialista al capitalismo, la burocracia sindical está tratando desesperadamente de revivir la autoridad del desacreditado Partido Demócrata.

Esto ya se ha demostrado en el creciente apoyo al llamamiento del Partido Socialista por la Igualdad para la formación de comités de base, que organizan a los educadores y otros trabajadores escolares para defender la educación pública en oposición a la capitulación cobarde de las burocracias sindicales.

En una entrevista reciente en Hard Knock Radio, Weingarten resató que los 'más cercanos en el terreno' van a 'tener que trabajar con ellos a través de las líneas partidistas sobre estos temas'. Weingarten presentó al ex presidente de la AFT, Al Shanker, su mentor, y al ex presidente del sindicato United Auto Workers, Walter Reuther, como los modelos para la 'construcción de coaliciones'.

Los docentes deben rechazar esto y recordar las historias de estas figuras. El legado de Reuther fue uno de compromiso de clase, la aceptación explícita del “derecho” de los capitalistas a obtener ganancias y las cacerías de brujas anticomunistas contra socialistas y militantes de izquierda

Tanto Shanker como Reuther fueron defensores acérrimos del imperialismo estadounidense y subordinaron políticamente las luchas de la clase obrera al Partido Demócrata y a los intereses geopolíticos de la clase dominante estadounidense.

Mientras Reuther se opuso a la Guerra de Vietnam debido a la oposición popular masiva, Shanker fue un firme defensor de la Guerra Fría que respaldó la masacre de millones de vietnamitas y denunció a los manifestantes antiguerra. Como presidente de la AFT de 1974 a 1997, sorprendió a los maestros en 1983 cuando pidió la formación de escuelas chárter y respaldó A Nation at Risk, el informe de la administración Reagan sobre educación que expuso su agenda corporativa de 'reforma escolar'.

Además de pedir al Senado que se oponga a la selección de McMahon, Pringle está instando a sus miembros a participar en su organización electoral establecida por la NEA llamada Education Votes.

Según el plan de acción Education Votes de la NEA, los docentes pueden inscribirse para recibir actualizaciones sobre los últimos procesos electorales 'desde las juntas escolares y las legislaturas estatales hasta los pasillos del Congreso', en los que se pide a los docentes que insten a 'los funcionarios electos a oponerse a la agenda profundamente impopular y dañina de Trump para las escuelas, los estudiantes y los educadores'.

Las elecciones de 2024 dejaron claro que el Partido Demócrata no tiene absolutamente nada que ofrecer a la clase trabajadora, excepto más guerra y austeridad, pero Weingarten y Pringle están dispuestos a canalizar la ira de sus afiliados hacia este mismo aparato para suprimir la oposición de los educadores a las políticas de Trump. No hay un punto final para la cobarde colaboración del aparato sindical con el estado capitalista, precisamente por el hecho de que están atados —a través de sus flujos de ingresos, intereses materiales generales y lealtad ideológica— por mil hilos al sistema de ganancias y al estado capitalista.

Weingarten y Pringle solo buscan defender el sistema capitalista de ganancias azotado por la crisis. Los docentes deben rechazar esto y los llamamientos estériles a apelar a los poderes establecidos. La lucha por una educación pública de alta calidad, la defensa de los derechos democráticos y el fin de la guerra y la explotación no puede ganarse sin desarrollar nuevas formas de lucha, independientes de las burocracias sindicales, y sin un combate políticamente consciente por el socialismo.

Para obtener más información sobre la creación de comités de base para educadores, complete e ste formulario a continuación.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 3 de diciembre de 2024).