Este artículo fue publicado originalmente en Twitter.

En una entrevista realizada la semana pasada en el podcast 'Jung & Naiv', el embajador de Ucrania en Alemania, Andrey Melnyk, volvió a defender al fascista, antisemita y colaborador nazi ucraniano Stepan Bandera. Esto no es ninguna sorpresa. Melnyk es un conocido admirador de Bandera.

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Esta vez, sin embargo, Melnyk fue más allá de lo habitual. No sólo alabó a Bandera como 'luchador por la libertad', sino que negó que las unidades de la OUN (Organización de Nacionalistas Ucranianos) que Bandera comandaba llevaran a cabo asesinatos en masa, diciendo: 'No hay pruebas de que las tropas de Bandera asesinaran a cientos de miles de judíos'.

Las declaraciones de Melnyk están al nivel de los negadores del Holocausto. La participación de los banderistas en los pogromos, los fusilamientos masivos de judíos y la guerra de exterminio nazi contra la Unión Soviética es un hecho histórico incontrovertible.

Cuando el periodista Tilo Jung se enfrentó a Melnyk sobre los crímenes cometidos por Bandera, el embajador ucraniano los defendió diciendo: 'No le diré hoy que me desvinculo de esto. Y eso es todo'.

Jung citó antes un folleto que la OUN distribuyó cuando la Wehrmacht nazi entró en Lviv: 'Gente, debéis saber esto: Los moscovitas, los polacos, los húngaros y los judíos son vuestros enemigos. Destrúyanlos, deben saberlo. Su liderazgo, su líder, Stepan Bandera'.

Las declaraciones de Melnyk no sólo desenmascaran al gobierno ucraniano, que rinde culto a Bandera y a la OUN a pesar de sus crímenes genocidas, erige estatuas y renombra calles y plazas en su honor.

También arroja luz sobre el carácter esencialmente fascista de la clase dirigente de Alemania, que 81 años después de la invasión de la Unión Soviética vuelve a rearmarse masivamente y a asumir un papel de liderazgo en la guerra por delegación de la OTAN en Ucrania contra Rusia.

Melnyk es una figura central en esto. Es un invitado bienvenido en los programas de entrevistas para conseguir apoyo para más entregas de armas alemanas a Ucrania. Cuando el canciller Scholz anunció el rearme masivo alemán en el Bundestag el 27 de febrero, Melnyk fue un invitado de honor.

El silencio del gobierno alemán sobre las recientes declaraciones de Melnyk no es simplemente un escándalo. Forma parte de una campaña deliberada para rehabilitar el fascismo y, en última instancia, al propio Hitler.

En 2014, el profesor de extrema derecha de Humboldt Jörg Baberowski dijo a Der Spiegel: 'Hitler no era un psicópata y no era vicioso. No quería que se hablara del exterminio de los judíos en su mesa'. Baberowski también es cortejado y defendido por políticos y medios de comunicación.

El SGP (Partido Socialista por la Igualdad de Alemania) y los Jóvenes y Estudiantes Internacionales por la Igualdad Social (JEIIS, o IYSSE pot sus siglas en inglés) advirtieron en su momento que la relativización de los crímenes históricos del imperialismo alemán sirve para preparar nuevas guerras y nuevos crímenes. Esto se está demostrando ahora.

Ya es hora de sacar las conclusiones necesarias del retorno del militarismo, del fascismo y de la guerra y de unirse a la lucha para construir un poderoso movimiento socialista antibélico de la clase obrera internacional.

(Publicado originalmente en inglés el 4 de julio de 2022)