Las transformaciones políticamente vitales en el World Socialist Web Site se basan en las poderosas bases establecidas durante los últimos 22 años de publicación diaria y continua del WSWS. Durante ese período, el World Socialist Web Site creó un registro incomparable por sus análisis y exposiciones de los crímenes del imperialismo estadounidense y por su lucha por construir un movimiento global contra la guerra basado en la clase trabajadora.
Este registro y las lecciones políticas invaluables de nuestra respuesta a tres décadas de guerras imperialistas ahora se vuelven mucho más accesibles para una audiencia internacional de trabajadores y jóvenes en el WSWS relanzado. Insto a todos los oyentes a revisar este registro a través de las fascinantes y exhaustivas exhibiciones del nuevo WSWS presentadas bajo los temas de “Guerra y militarismo” y “Antiimperialismo”.
En esta lucha, nos hemos posicionado sobre los hombros de los grandes marxistas del siglo XX, ante todo Lenin y Trotsky, quienes establecieron que tanto la guerra como la revolución eran resultados inevitables, en palabras de Trotsky, de “una revuelta de las fuerzas de producción contra la forma política de la nación y Estado”. Esta concepción marxista fundamental fue afinada por el Comité Internacional de la Cuarta Internacional en respuesta a la globalización capitalista, la integración sin precedentes de la producción internacional y la inmensa agudización de los antagonismos entre las principales potencias imperialistas.
El World Socialist Web Site fue lanzado en febrero de 1998 después de la disolución de la Unión Soviética y en medio de las proclamas triunfalistas del fin de la historia, otro siglo estadounidense y un “momento unipolar” concretado en la primera guerra unilateral de agresión de Estados Unidos contra Irak.
El WSWS comenzó a publicarse en línea durante las preparaciones del imperialismo estadounidense para otra guerra de agresión, esta vez en los Balcanes, con el bombardeo de Serbia dirigido por la OTAN en 1999.
La guerra contra Serbia se lanzó con el pretexto de una supuesta intervención humanitaria contra las muy exageradas acusaciones de “limpieza étnica” en Kosovo a manos del régimen encabezado por el demonizado Slobodan Milosevic.
El WSWS, sin embargo, expuso las fuentes objetivas mucho más profundas de esta guerra. Su análisis se resume en el ensayo de David North, “Después de la matanza: lecciones políticas de la guerra de los Balcanes”.
Declaró: “Lejos de representar una ruptura humanitaria con el pasado, la guerra de los Balcanes de 1999 pone de manifiesto el virulento resurgimiento de sus características más malignas: la legitimación del uso desnudo de un poder militar abrumador contra países pequeños en pro de los intereses estratégicos de ‘gran potencia’, la cínica violación del principio de soberanía nacional y el restablecimiento de facto de formas colonialistas de subyugación y el resurgimiento de antagonismos interimperialistas que entrañan las semillas de una nueva guerra mundial”. Este análisis profético ha resistido la prueba del tiempo.
En el curso de la intervención estadounidense en los Balcanes, el World Socialist Web Site identificó una nueva base de apoyo para el imperialismo entre las capas de la clase media-alta, cuya riqueza había aumentado durante el auge financiero. Esto incluyó a elementos que habían participado en el movimiento de protestas contra la guerra de Vietnam y que se alinearon detrás de la repugnante causa del intervencionismo humanitario. Durante el periodo posterior, sus intereses se reflejaron políticamente en tendencias de pseudoizquierda que apoyan el imperialismo, se oponen al socialismo y son hostiles a las luchas de la clase trabajadora. El WSWS ha librado una lucha implacable contra esta capa sociopolítica internacional y su apoyo a las guerras imperialistas de Estados Unidos, desde Serbia hasta Siria.
El World Socialist Web Site estableció un registro incomparable de artículos y comentarios sobre los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, sus orígenes y consecuencias políticas. En las casi dos décadas transcurridas desde entonces, la perspectiva presentada por el WSWS desde el mismo día de los ataques ha sido completamente confirmada, una reivindicación del poder del análisis marxista y una política de principios.
El día después de los ataques del 11 de septiembre, el World Socialist Web Site advirtió: “Son las políticas seguidas por Estados Unidos, impulsadas por los intereses estratégicos y financieros de la élite gobernante, las que sentaron las bases de la pesadilla que aconteció el martes. Las acciones que ahora contempla la Administración de Bush ... solo prepararán el escenario para más catástrofes”. Explicó además que “Desde el punto de vista del Gobierno estadounidense, la cruzada contra el terrorismo ha sido en mayor medida una campaña de propaganda para justificar la violencia militar estadounidense en todo el mundo que un esfuerzo consciente para proteger al pueblo estadounidense”.
Los acontecimientos posteriores han reivindicado plenamente este análisis. La “guerra contra el terrorismo” se convirtió en el pretexto para un resurgimiento masivo del neocolonialismo imperialista, incluida la invasión de Irak en 2001.
Les siguieron las guerras de cambio de régimen en Libia y Siria, en las que Washington, bajo la Administración demócrata de Barack Obama, patrocinando a las mismas fuerzas de Al Qaeda que supuestamente combatía. EE.UU. ha llevado a cabo operaciones de asesinatos selectivos y tortura clandestina en decenas de países alrededor del mundo, mientras que la supuesta amenaza de “terrorismo” ha sido el pretexto de ataques masivos a los derechos democráticos y el espionaje del pueblo en EE.UU. y el planeta entero.
El WSWS ha trabajado incansablemente para exponer los crímenes del imperialismo estadounidense, que han matado y mutilado a millones y destruido sociedades enteras, desde Afganistán e Irak hasta Libia, Siria, Yemen, entre otros en su búsqueda del dominio global.
También ha luchado con intransigencia por el programa contra la guerra del Comité Internacional de la Cuarta Internacional, explayado en su declaración de 2016 “El socialismo y la lucha contra la guerra”. El CICI avanzó los principios indispensables para la construcción de un genuino movimiento contra la guerra, insistiendo en que debe basarse en la lucha políticamente independiente de la clase trabajadora, unificada a través de las fronteras nacionales en una lucha internacional por la abolición del sistema capitalista del Estado nación y la creación de una federación socialista mundial. “La guerra permanente de la burguesía se debe responder con la perspectiva de la revolución permanente de la clase obrera”, afirmó.
Celebramos este mitin en condiciones del peligro cada vez mayor de una guerra mundial. El aparato militar estadounidense ha anunciado que la “guerra contra el terrorismo” ha sido suplantada por conflictos entre “grandes potencias” y se prepara acorde a esto. Durante la semana pasada, Estados Unidos y sus aliados de la OTAN realizaron ensayos generales para el bombardeo nuclear de Rusia, así como para la guerra en el Pacífico con China.
Al mismo tiempo, hay un poderoso resurgimiento de las luchas de la clase trabajadora internacional, en la forma de protestas masivas desde Nigeria a Chile y Tailandia, la resistencia de los maestros, los trabajadores de la salud y otros en las Américas, Europa y más allá contra la respuesta homicida de la burguesía a la pandemia del COVID-19.
Insto a todos los partidarios del WSWS a utilizar este recurso invaluable para educarse como marxistas y unirse al Partido Socialista por la Igualdad, o para construir nuevas secciones del Comité Internacional de la Cuarta Internacional en los países donde tales partidos aún no existen.
En los próximos días, el relanzamiento del World Socialist Web Site demostrará su valor como el arma más poderosa en la guerra revolucionaria contra la guerra que debe emprender la clase trabajadora internacional para su propia supervivencia.
(Publicado originalmente en inglés el 30 de octubre de 2020)