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Trabajadores postales y jubilados de Estados Unidos participaron el jueves en manifestaciones nacionales contra las amenazas de la administración Trump de privatizar el Servicio Postal de Estados Unidos (USPS). Sujeto a años de reestructuración corporativa, la semana pasada el director general de Correos, Louis DeJoy, llegó a un acuerdo con Elon Musk y el Departamento de Eficiencia Gubernamental para ayudar a recortar el gasto y desmantelar o desafiar los requisitos legales sobre financiación de pensiones, mandatos de servicio y otras medidas.

La manifestación fue convocada por el Sindicato Americano de Trabajadores Postales (APWU, todas las siglas en inglés), que agrupa a empleados y trabajadores de centros de clasificación y distribución. La asistencia varió desde unas pocas docenas en lugares como Dallas, Texas, hasta unos pocos cientos en el bajo Manhattan. Reporteros del WSWS difundieron la declaración del Comité de Base de Trabajadores del USPS: '¡Por un movimiento de base para salvar el Servicio Postal y oponerse a la dictadura!'.

La declaración dice:

Tiempos extraordinarios requieren medidas extraordinarias. La única manera de salvar el Servicio Postal —y la democracia estadounidense— es mediante la movilización masiva de la clase trabajadora. La clase trabajadora es la fuerza más poderosa del planeta. Si tan solo supiéramos cómo usar ese poder, podríamos derrotar los ataques de Trump y su puñado de oligarcas y derechistas.

Enfatizaba que dicho movimiento requería una lucha contra los burócratas sindicales y el Partido Demócrata:

Pero ante los ataques más profundos en los 250 años de historia del Servicio Postal, los dirigentes sindicales de la Asociación Nacional de Carteros (NALC), la Asociación Nacional de Carteros Rurales (NRLCA) y APWU no han propuesto, ni mucho menos organizado, una lucha seria contra estos ataques. En cambio, ofrecen su colaboración, e incluso la NALC propone ayudar a encontrar maneras de cerrar la brecha de financiación en los planes de pensiones de los trabajadores trasladando el fondo al mercado de valores (en rápida caída).

Esto quedó demostrado por el hecho de que los sindicatos convocaron manifestaciones por separado, con la NALC y la NRLCA realizando manifestaciones el domingo. Aparentemente, están haciendo poco esfuerzo por movilizar a sus más de 600.000 miembros activos, con solo una pequeña fracción de los trabajadores postales presentes en la manifestación del jueves.

Sin embargo, una profunda ira y preocupación por la apuesta de Trump por la dictadura fue una constante en cada manifestación del jueves. Lo que Trump está haciendo 'es horrible', dijo un trabajador postal jubilado de la ciudad de Nueva York. 'Creo que deberíamos hacer todo lo posible para expulsarlo. Porque si se fijan, está intentando disolver todos los empleos del gobierno. Por ejemplo, hizo que Musk recortara la Seguridad Social. Luego quería desmantelar el IRS”.

'Si lo piensan, eso está desmantelando toda la estructura de Estados Unidos. Porque quiere tener el control de todo. Quiere ser el alcalde de Nueva York. Cree que tiene derecho a intervenir en cualquier asunto en el que quiera intervenir. Y fue él quien dijo que se debería dejar todo en manos de los estados. Si piensa así, ¿por qué se mete en los asuntos de Nueva York? Evidentemente, solo lo hace por lo que él quiere”.

Otra manifestante en la ciudad de Nueva York dijo: 'Estoy muy molesta con lo que está sucediendo y solo tenemos que concienciar al público, que sea plenamente consciente de lo que está sucediendo, y permitir que se involucren en nuestra lucha para salvar el Servicio Postal'.

Concluyó: '[Necesitamos a todos juntos] colectivamente, porque esto nos va a afectar a todos. No somos una entidad separada, todos estamos involucrados en esto y todos debemos luchar juntos para ganar esta batalla'.

En Pasadena, California, John declaró al WSWS: 'Creo que casi todas las órdenes ejecutivas han sido, como mínimo, ilegales. Han estado suplantando el poder que se supone que tiene el Congreso'. El Congreso ha cedido su autoridad. Es decir, los republicanos han cedido su autoridad constitucional a un presidente desquiciado.

John dijo estar enojado con los demócratas por permitir que Trump se saliera con la suya con sus políticas. 'Los demócratas tuvieron la oportunidad de obstruir la votación de clausura [sobre el presupuesto el viernes pasado]. No lo hicieron. No lo lograron. Hay algunos demócratas a los que he apoyado financieramente y que ya no apoyaré'.

Dwayne, otro cartero de California, dijo que los demócratas 'siempre piden un Partido Republicano fuerte... Así que sí, no los apoyo en el Congreso'.

'Creo que es extremadamente preocupante que se deporte a personas simplemente por ser indocumentadas. Las personas tienen derecho a solicitar asilo en Estados Unidos, pero las están deportando. Y ni siquiera sabemos si son indocumentadas o ciudadanos comunes. Simplemente están deportando a personas por ser hispanas'.

John continuó: 'Lo que estamos haciendo [al protestar contra Trump] no solo es racional, sino que... mantiene a Estados Unidos en un orden constitucional, donde las personas no se peleen entre sí. La mayoría de los estadounidenses, si supieran que el Proyecto 2025 se va a implementar, estarían aterrorizados. Si lo supieran, serían increíblemente antipáticos. No los apoyarían en absoluto'.

“La mayoría de la gente en Estados Unidos son trabajadores”, señaló, “pero ahora se está obligando a los niños a trabajar. Es decir, esto es trabajo infantil. Es absolutamente inadmisible. ¿Cómo podrían estos estados legalizar el trabajo infantil? Literalmente, estamos retrocediendo a 1880. Incluso aquí en Pasadena, los maestros han perdido sus hogares y están a punto de perder sus trabajos debido a todos estos recortes. Es necesario contraatacar”.

En la manifestación de la ciudad de Nueva York, los reporteros del WSWS se encontraron con varios jubilados que habían participado en la huelga salvaje nacional de 1970. La huelga, la más grande de la historia de los trabajadores federales y llevada a cabo desafiando las leyes antihuelga, fue provocada por los planes del presidente Richard Nixon de degradar el servicio postal de su nivel ministerial a una agencia independiente.

Uno describió las condiciones de finales de la década de 1960, que no son muy diferentes a las que enfrentan los trabajadores postales hoy. Si te lastimabas, en lugar de intentar ayudarte, intentaban demostrar que era tu culpa. Un trabajador perdió el brazo porque no tenían el control de seguridad de corte. Su trabajo era despejar las cintas transportadoras cuando se atascaban... Alguien en otra zona vio que estaba apagado, no lo revisó y logró volver a encenderlo, pero su brazo quedó atrapado y lo perdió.

'Así que cuando nos declaramos en huelga, lo hicimos por todas esas cosas, mejores condiciones laborales. También queríamos turnos permanentes' en lugar de tener que licitar turnos cada tres meses. 'Porque conseguíamos una niñera y teníamos que estar trabajando a las 2 p.m. y tres meses después, a medianoche'.

Otro jubilado dijo que durante la huelga de 1970, 'trajeron a los militares para intentar repartir el correo... [pero] realmente no dieron abasto'.

La huelga fue muy significativa porque teníamos bajos salarios y, en ese momento, tuvimos que pedir aumentos al Congreso para conseguir uno. Con esta acción, concientizamos a la gente sobre lo bajo que era nuestro salario y el trabajo profesional que realizábamos. Algunas personas tuvieron que recibir asistencia social para mantener a sus familias debido a su bajo salario. Al hacer huelga, le hicimos saber al público y a la gente que es muy importante que obtengamos un aumento para alimentar a sus familias.

Un mecánico de mantenimiento en Washington D.C. declaró al WSWS: «La gente no se da cuenta de lo importantes que son. Porque sin ellos hablando en nuestro nombre, ni siquiera tendríamos electricidad en ningún lugar. Es decir, tenemos gente congregándose en Hawái ahora mismo. Tenemos gente congregándose en el frío abrasador de Alaska ahora mismo... ¡Vengan aquí y únanse a nosotros también y demuéstrenle a Trump, demuéstrenle a Elon, hombre!».

(Artículo publicado originalmente en inglés el 21 de marzo de 2-25)