El Partido de los Trabajadores de Turquía (TİP) fue fundado en 2017 tras un cambio de nombre realizado por el Partido Comunista Popular de Turquía (HTKP), que se escindió del Partido Comunista de Turquía (TKP) estalinista en 2014.

Recientemente ha sufrido una serie de escisiones y dimisiones masivas. El rasgo común de todas ellas, que se produjo con diversas críticas políticas u organizativas secundarias a la dirección del partido, es la ausencia de un análisis marxista con base histórica de la línea política de colaboración de clases del TİP como partido pseudoizquierdista descendiente del estalinismo. Por tanto, ninguno de los grupos que surgieron de las escisiones pudo ir más allá de establecer nuevas tendencias muy similares al TİP.

Esto también se aplica a las raíces del oportunismo del propio TİP. Desde un punto de vista histórico y teórico, el TİP no basó su ruptura con el TKP estalinista en un estudio y asimilación de las grandes cuestiones estratégicas e histórico-mundiales planteadas por la lucha de León Trotsky contra el estalinismo. Esta es una característica común de todas las tendencias que surgieron con la desintegración de los partidos estalinistas después de la disolución de la URSS.

En los últimos años, el World Socialist Web Site y el Sosyalist Eşitlik Grubu (Grupo Socialista por la Igualdad) han expuesto la orientación cada vez más abierta del TİP hacia la burguesía nacional y el imperialismo, y su carácter antimarxista, en una serie de polémicas y análisis.

Explicamos que su cambio de nombre en 2017 tenía como objetivo explotar la popularidad del antiguo Partido de los Trabajadores de Turquía, un partido parlamentario reformista de los años 60 y 70 que tuvo una influencia considerable entre los sectores avanzados de la clase trabajadora.

Sin embargo, quedó claro, especialmente durante las elecciones presidenciales de 2023 y las elecciones locales de 2024, que lo que estaba en juego era más que un simple cambio de nombre. Reflejaba la orientación abierta del partido hacia el imperialismo y la burguesía y tenía como objetivo dirigir la creciente oposición entre la clase trabajadora y la juventud hacia los canales seguros del orden capitalista.

Un partido parlamentario orientado hacia el establishment político burgués

En 2018, el TİP se presentó a las elecciones parlamentarias desde las listas del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) nacionalista kurdo y ganó dos escaños en las elecciones parlamentarias, a las que se presentó en una cooperación política sin principios con el HDP. El número de escaños del TİP aumentó a cuatro, con un diputado cada uno del HDP y del Partido Republicano Popular Kemalista (CHP).

Los últimos años han sido un período de inflación real que alcanzó los tres dígitos, empobreciendo a la clase trabajadora y la ira social llegando a un punto de ebullición. Las condiciones de escalada del militarismo y la agresión imperialista en todo el mundo y el colapso de la democracia han empujado a la clase dominante turca hacia el militarismo en el extranjero y el autoritarismo en el país.

Especialmente después de que el gobierno pusiera fin al 'proceso de paz' con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en 2015, la represión contra los políticos kurdos electos aumentó. El 'proceso de paz', que había comenzado en años anteriores con el apoyo de Washington y las capitales europeas, colapsó después de que Estados Unidos convirtiera a las milicias kurdas en Siria en su principal fuerza de poder. Después de 2018, la oposición de los diputados del TİP en el parlamento se hizo visible en los medios burgueses y las redes sociales.

La entrada del TİP en las elecciones parlamentarias de mayo de 2023 en alianza con el HDP pero con sus propias listas tenía como objetivo impedir la construcción de una alternativa socialista genuina para organizar la oposición de la clase trabajadora y la juventud contra el imperialismo y la represión estatal, especialmente contra los kurdos. Este sentimiento encontró una resonancia significativa entre varios segmentos de la sociedad, que veían con odio a las facciones gobernantes y de oposición de la burguesía. El TİP trató de neutralizar la demanda de tal giro político.

En las elecciones celebradas el 14 de mayo de 2023, el TİP ganó 4 escaños parlamentarios con cerca de 1 millón de votos (1,76 por ciento). No presentó candidatos en muchas provincias como parte de su alianza con el HDP – que se presentó a las elecciones como el Partido de la Izquierda Verde, ahora el Partido de la Igualdad y la Democracia de los Pueblos, (DEM).

El TİP demostró su capacidad de movilizar a decenas de miles de personas en las manifestaciones del Primero de Mayo en Estambul durante la campaña electoral. Atrajo a muchas personas que en el pasado se habían interesado por la política socialista y que estaban enfadadas con el sistema capitalista, al tiempo que recibía un apoyo significativo de la clase media alta.

La rendición a la OTAN y la campaña reaccionaria del CHP

Que la lucha contra las instituciones imperialistas como la OTAN y el FMI, que estaba incluida en el programa del TİP, era sólo sobre el papel, quedó demostrado cuando la adhesión de Finlandia a la OTAN fue aprobada sin un solo voto negativo en una sesión parlamentaria el 30 de marzo, apenas un mes y medio antes de las elecciones de 2023.

Los diputados del TİP, que no se habían opuesto al proyecto de ley presentado al parlamento por el presidente Recep Tayyip Erdoğan y apoyado con entusiasmo por el CHP, no participaron en la votación parlamentaria y no dijeron no a la ampliación de la OTAN. No podía haber justificación para que los diputados del TİP, que nunca rechazan la oportunidad de hablar en la tribuna del parlamento, no participaran en una votación tan crítica cuando el mundo entero está siendo arrastrado al vórtice de una tercera guerra mundial por la agresión imperialista de EE.UU. y la OTAN contra Rusia. Fue una señal para los capitales imperialistas y los círculos gobernantes de Turquía.

Esto confirmó que la alianza del TİP con el HDP no era una simple cooperación electoral. Al abstenerse de votar y declarar que “las preocupaciones de seguridad de Finlandia son legítimas”, el HDP dio un apoyo tácito a la expansión de la OTAN. Esto está en línea con la estrecha alianza de los líderes nacionalistas burgueses kurdos con la OTAN en Siria e Irak. Los representantes del HDP también participan en la Asamblea Parlamentaria de la OTAN y presiden sus diversas comisiones.

La orientación del TİP hacia el imperialismo y la burguesía nacional también se reveló en su apoyo a Kemal Kılıçdaroğlu, el candidato de la Alianza Nacional liderada por el CHP, que llevó a cabo una campaña mucho más explícitamente proimperialista que la Alianza Popular de Erdoğan en las elecciones presidenciales de 2023.

La alianza estaba formada por el CHP, el Partido del Bien de extrema derecha que se separó del fascista MHP, el Partido de la Felicidad islamista, del que nació el AKP de Erdoğan, el Partido del Futuro del ex primer ministro Ahmet Davutoglu, que se separó del AKP y es uno de los principales partidarios de la guerra de cambio de régimen organizada por la CIA en Siria, el partido DEVA de Ali Babacan, ex ministro de Economía y Asuntos Exteriores y figura de confianza del capital financiero, y finalmente el Partido Demócrata de derecha.

Las tendencias pseudoizquierdistas, en particular el TİP, desempeñaron un papel divisorio al presentar esta alianza de derecha al servicio del imperialismo y la clase dominante como una alternativa progresista al gobierno reaccionario de Erdoğan.

No fue casualidad que el TİP no participara en la votación y que Kılıçdaroğlu, a quien apoyaba como candidato presidencial, viajara antes de las elecciones a los principales países de la OTAN, como Estados Unidos, el Reino Unido y Alemania, y se reuniera con importantes miembros de la élite política y financiera.

En los días agitados de las elecciones, que tuvieron lugar en medio de la guerra de la OTAN contra Rusia en Ucrania, Kılıçdaroğlu acusó a Rusia de interferir en las elecciones sin pruebas, un claro mensaje a los capitales imperialistas. Kılıçdaroğlu había declarado previamente que la OTAN era “la garante de la democracia en el siglo XXI”.

Nada de esto impidió que el TİP apoyara plenamente al CHP y a la alianza de derecha que lideraba. El apoyo a Kılıçdaroğlu, legitimado con la retórica de “derrocar el régimen unipersonal de Erdoğan”, estaba directamente vinculado al objetivo del TİP de mantener la creciente oposición social dentro del sistema capitalista a través del parlamento y evitar el desarrollo de un movimiento independiente de la clase trabajadora.

El TİP presentó las prácticas antidemocráticas del gobierno de Erdoğan no como resultado de la crisis del capitalismo mundial y la política general de la clase dominante, sino como una elección arbitraria que podría terminarse reemplazando un gobierno capitalista por otro. Para el TİP, el antagonismo principal no era entre la clase obrera y la burguesía a nivel internacional, sino entre el “bloque gobernante” y el “bloque de la oposición” a nivel nacional.

La falsedad de la afirmación de que era necesario apoyar al CHP para “defender la democracia” contra las prácticas de estado policial del gobierno quedó en evidencia en los años de apoyo de Kılıçdaroğlu a la represión gubernamental de los políticos kurdos y su destacado papel en la campaña reaccionaria contra los sirios.

En el período previo a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, Kılıçdaroğlu llevó aún más lejos la propaganda antirrefugiados y racista. Hizo una alianza electoral con el Partido de la Victoria, dirigido por Ümit Özdağ, un fascista conocido por su postura contraria a los solicitantes de asilo. Frente a esta sucia alianza que apuntaba no solo a los refugiados sirios sino también a los kurdos, el TİP, el HDP y otros sectores de la pseudoizquierda siguieron apoyando a Kılıçdaroğlu sin críticas.

Respuesta nacionalista al genocidio de Gaza y otras cuestiones globales críticas

La política del TİP en las elecciones locales de este año fue una confirmación y repetición de la línea de derecha seguida en las elecciones de 2023. La guerra imperialista de la OTAN contra Rusia, el genocidio en Gaza y la pandemia de COVID-19 no estaban en su agenda. Formó una alianza con el CHP y difundió la ilusión de que el sistema capitalista podría mejorarse ganando municipios donde presentó candidatos. Con el apoyo del CHP, el presidente del partido, Erkan Baş, fue nominado como candidato a alcalde de Gebze, una importante zona obrera cercana a Estambul.

El TİP nunca ha puesto en el primer plano de su agenda el genocidio de un año de duración en Gaza, apoyado por Israel y respaldado por la OTAN. Cuando se vio obligado a reaccionar al respecto, básicamente repitió la política de las organizaciones pseudoizquierdistas de clase media a nivel internacional de pedir a los líderes políticos que son cómplices directos o indirectos del genocidio, o a la ONU, que apoyen un alto el fuego.

Uno de los últimos ejemplos llamativos de esto fue el llamamiento del TİP al gobierno de Erdoğan el 24 de septiembre. Tras el ataque terrorista masivo de Israel con la explosión de beepers en el Líbano, que extendió el genocidio en Gaza, el TİP escribió en X/Twitter: “Hacemos un llamamiento al gobierno de la República de Turquía para que detenga la agresión imperialista del régimen sionista asesino y tome iniciativas diplomáticas para lograr un alto el fuego inmediato en el Líbano y Gaza”.

La indiferencia del TİP reflejó el hecho de que no solo Erdoğan, sino también los partidos de oposición burgueses a los que recurrió tenían estrechos vínculos con el imperialismo y el estado sionista. Hubo un vínculo directo entre el fracaso en la defensa de los palestinos y el fracaso en la defensa de los refugiados árabes sirios, que fueron utilizados como chivos expiatorios de todos los problemas sociales causados por el imperialismo y el capitalismo a través de la propaganda chovinista de su aliado, el CHP.

Debe considerarse junto con la indiferencia del TİP ante otros problemas críticos que enfrenta la clase trabajadora a nivel internacional. Cuando en 2022 estalló la guerra en Ucrania, el TİP se limitó a emitir una vaga declaración en la que “llamaba a la paz”. Esta declaración no estaba dirigida a la clase obrera, sino a los gobiernos imperialistas y capitalistas. Sin embargo, la guerra no se puede detener llamando a los gobiernos y políticos capitalistas, sino solo mediante la lucha de la clase obrera internacional sobre una base socialista e internacionalista contra la barbarie capitalista e imperialista. Esto se ve subrayado por la guerra de Estados Unidos y la OTAN contra Rusia, el genocidio en Gaza y la escalada de la guerra en Oriente Medio.

El TİP y otros partidos pseudoizquierdistas comparten la misma indiferencia que los partidos burgueses ante otra crisis global, la pandemia de COVID-19, que continúa con una nueva ola y ha matado al menos a 27,3 millones de personas hasta julio de 2024, según el rastreador de The Economist. La adopción mundial de la política de “COVID para siempre” por parte de las clases dominantes de los países imperialistas está costando la vida y la salud de millones de personas. Para ellos, la acumulación de ganancias y riqueza viene primero, último y siempre.

Todo el espectro de tendencias pseudoizquierdistas, incluidos los partidos nacionalistas-reformistas como el TİP, es orgánicamente incapaz de producir soluciones a las crisis globales causadas por el capitalismo. La pandemia, que es una crisis mundial, solo se puede combatir a nivel internacional y con un programa socialista basado en la clase trabajadora, como en el caso del calentamiento global y el cambio climático. Partidos como el TİP, que están inextricablemente ligados al sistema de estado-nación burgués, son cómplices de la destrucción causada por el capitalismo al no ofrecer soluciones.

La lucha por el socialismo no puede limitarse a las fronteras nacionales y las estructuras del estado-nación. Los partidos pseudoizquierdistas que rechazan el papel revolucionario de la clase trabajadora y el programa del socialismo internacional sirven para asegurar la supervivencia del sistema capitalista arrastrando a las masas de un país a otro hacia la derrota. Esta es la función principal de los Socialistas Demócratas de América en Estados Unidos, Jeremy Corbyn en el Reino Unido, Syriza en Grecia, Podemos en España, el Partido de la Izquierda en Alemania o el JVP en Sri Lanka.

Jeremy Corbyn como modelo para el TİP

Es revelador que uno de los principales aliados internacionales del TİP sea Corbyn, a quien la pseudoizquierda sigue glorificando y apoyando a pesar de sus devastadoras traiciones políticas.

Como escribió León Trotsky en 1934:

En el terreno internacional, el centrista se distingue, si no por su ceguera, al menos por su miopía. No entiende que no se puede construir en el período actual un partido revolucionario nacional salvo como parte de un partido internacional; en la elección de sus aliados internacionales, el centrista es incluso menos exigente que en su propio país.

El líder del TİP, Baş, visitó a Corbyn, quien se vio obligado a presentarse como candidato independiente en las elecciones generales británicas en Londres a principios de julio porque fue expulsado del Partido Laborista que dirigía, y ambos hicieron campaña juntos.

En la campaña electoral, Corbyn se negó a cuestionar el apoyo del líder laborista Sir Keir Starmer a la guerra de la OTAN contra Rusia, el genocidio de Israel en Gaza y las medidas de austeridad. En general, esta campaña fue similar a la posición del TİP en Turquía. Al igual que Corbyn, Baş, aunque sigue una política alineada con la OTAN, no se opone a los partidos con los que está aliado en su apoyo al genocidio en Gaza y la guerra en Ucrania. En las elecciones, el Partido Socialista por la Igualdad, la sección británica del Comité Internacional de la Cuarta Internacional, fue el único partido que propuso una alternativa socialista tanto a los conservadores como a los laboristas y a su muleta de “izquierda”, la campaña de Corbyn.

El historial de Corbyn como líder laborista incluye permitir una votación libre sobre el bombardeo de Siria, apoyar el programa de armas nucleares Trident y la OTAN, negarse a oponerse a la caza de brujas de él mismo y sus partidarios por antisemitas y oponerse resueltamente a cualquier desafío a los conservadores.

Este historial es como el del CHP, que se sienta con el Partido Laborista en la llamada Internacional Socialista. En su afán por bloquear cualquier movimiento de masas contra el gobierno, su nuevo líder, Özgür Özel, ha iniciado un “proceso de distensión” con Erdoğan en medio de una crisis cada vez más profunda del régimen capitalista.

El papel de Corbyn en Gran Bretaña es impedir el desarrollo de un movimiento revolucionario genuino e independiente de este Partido Laborista imperialista y de derecha, actuando como su apéndice de izquierda y su apologista. De manera similar, el TİP ha asumido el papel de ser el “ala izquierda” de la oposición burguesa liderada por el CHP en Turquía.

El camino a seguir

El hecho de que decenas de miles de personas que se habían registrado en el TİP con la expectativa de una política revolucionaria socialista se hayan alejado rápidamente de él en los últimos tiempos es una expresión de una reacción políticamente poco clara al rápido giro a la derecha. Las demandas de la clase obrera y la juventud no encajan en la política reformista del TİP. Sólo una dirección genuinamente marxista con un programa socialista internacional basado en principios puede ofrecer a la clase obrera y a la juventud una salida para salir del impasse de la política nacional-oportunista de la pseudoizquierda.

El CICI es el único representante de la continuidad histórica de la lucha de Trotsky por defender los principios, el programa y el legado de la Revolución de Octubre de 1917, que se remonta a la fundación de la Oposición de Izquierda en 1923 y de la Cuarta Internacional en 1938.

El Comité Internacional fue fundado en 1953 para defender a la Cuarta Internacional contra la tendencia oportunista y revisionista conocida como pablismo, que buscaba liquidar el movimiento trotskista en partidos y organizaciones controladas por estalinistas, socialdemócratas y nacionalistas burgueses.

El objetivo central del CICI es unir a la clase obrera internacional en una perspectiva socialista e internacionalista, para poner fin al sistema capitalista e instaurar el socialismo en todo el mundo. En su Programa de Transición publicado en la fundación de la Cuarta Internacional, Trotsky declaró que la crisis histórica de la humanidad se había reducido a una crisis de dirección revolucionaria y dijo de los cuadros que fundaron la Cuarta Internacional: “Fuera de estos cuadros no existe una sola corriente revolucionaria en este planeta que realmente merezca ese nombre”. La tarea de construir secciones del CICI hoy se basa en estos puntos de Trotsky, que siguen siendo válidos.

La perspectiva del CICI de un socialismo internacional y una política de clase independiente. Se opone irreconciliablemente a todos los partidos nacionalistas, reformistas y pseudoizquierdistas. Los trabajadores, intelectuales y jóvenes que buscan un movimiento socialista verdaderamente revolucionario deberían participar en la construcción del Sosyalist Eşitlik Partisi como sección del CICI en Turquía.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 20 de noviembre de 2024)