En medio de las negociaciones para formar una nueva coalición de gobierno en Berlín, el gobierno federal alemán amenaza a Rusia con el uso de armas nucleares. En una entrevista concedida a Deutschlandfunk el pasado jueves, la ministra de Defensa en funciones, Annegret Kramp-Karrenbauer (Demócratas Cristianos, CDU), declaró: 'Tenemos que dejar muy claro a Rusia que al final —y esa es también la doctrina de disuasión— estamos dispuestos a utilizar esos medios [armas nucleares] para que tenga un efecto disuasorio de antemano y a nadie se le ocurra, por ejemplo, atacar a los socios de la OTAN en las zonas sobre los estados bálticos o en el mar Negro. Esa es la idea central de la OTAN, de esta alianza, y se adaptará al comportamiento actual de Rusia'.

El hecho de que Kramp-Karrenbauer hable del uso de armas nucleares contra Rusia sin pestañear da una visión desgarradora del estado de ánimo en las altas esferas del Estado alemán. Ochenta años después del ataque de la Wehrmacht nazi a la Unión Soviética y de la guerra de aniquilación en el Este, se discuten a espaldas de la población escenarios que ponen directamente en peligro cientos de millones de vidas. Estas discusiones tienen lugar en medio de la pandemia que hace estragos, que ha visto a la élite gobernante sacrificar a miles de personas para proteger los beneficios de las empresas.

La página web oficial del Ministerio de Defensa dijo que la ministra había elegido sus 'claras palabras con motivo de la reunión del grupo de planificación nuclear' en la reunión de ministros de Defensa de la OTAN a finales de la semana pasada. Kramp-Karrenbauer ha dejado claro que 'Alemania está y seguirá estando firmemente integrada en la planificación nuclear de la alianza. Alemania cumple con sus obligaciones en la alianza'.

Un informe del Frankfurter Allgemeine Zeitung (F.A.Z.) sobre la reunión de la OTAN explica lo que esto significa en términos concretos. 'Eso podría significar, por ejemplo, que los tornados alemanes equipados con bombas atómicas se trasladen al flanco oriental cuando se alcance un determinado umbral de conflicto. Esto no se discute en público, pero forma parte de las consideraciones estratégicas cuando el llamado grupo de planificación nuclear, al que pertenecen todos los estados miembros excepto Francia, proporciona asesoramiento', señala el periódico.

En otras palabras: Los aviones de guerra alemanes armados con bombas atómicas estadounidenses almacenadas en Alemania se trasladarían a la frontera rusa en caso de conflicto y posiblemente también las lanzarían, con consecuencias imprevisibles. Una guerra nuclear entre la OTAN y Rusia no sólo convertiría a toda Europa en un desierto nuclear, sino que pondría en cuestión la supervivencia de toda la humanidad.

El artículo de F.A.Z, titulado 'Planificación de la defensa de la OTAN: El Arte de la Disuasión Flexible', muestra con detalle la agresividad con la que la OTAN está avanzando en los preparativos de guerra contra Rusia y el papel central que desempeña Alemania en ello.

El nuevo concepto 'Defensa y disuasión en el área euroatlántica' (DDA), adoptado en junio, se está aplicando actualmente. El primer paso en esta dirección es el 'Plan Estratégico AOR de Saceur', que reestructura el área de responsabilidad (AOR) del comandante en jefe para Europa (Saceur)', explicó la F.A.Z. La alianza vuelve 'a una estructura organizativa que ya existía durante la Guerra Fría'. Cada cuerpo tiene 'una zona de operaciones precisamente asignada'. Por otro lado, 'se trata de otras amenazas y de la capacidad de reaccionar con flexibilidad ante ellas', según la F.A.Z.

Los planes se leen como una forma moderna de guerra total. Un plan de operaciones estipula actuar 'con prontitud y eficacia'. Para ello, la alianza quiere 'incluir en la defensa a todos sus cuarteles generales' en el futuro, lo que por supuesto también se aplica a la rápida movilización y traslado de las unidades de combate. En definitiva, 'se trata de recuperar el dominio de la escalada'. La 'parte más complicada' es 'la estrategia nuclear'.

El gobierno federal entrante tendrá la tarea de implementar estos planes de guerra. 'El ciclo de planificación' está, 'como es habitual, diseñado para cuatro años, lo que es importante para el nuevo gobierno federal', escribe la F.A.Z. Esto 'definiría las futuras prioridades e inversiones, incluyendo el gasto en defensa'. Se trata de proporcionar las necesarias 'capacidades militares que hagan posible el despliegue real de las tropas: reconocimiento, transporte aéreo estratégico, gestión de operaciones digitales, defensa antimisiles'.

Los planes para la puesta en marcha de estos enormes proyectos bélicos y de armamento ya han sido ultimados. En mayo, el Ministerio de Defensa adoptó las 'piedras angulares para el futuro de la Bundeswehr (ejército alemán)', que pretenden preparar eficazmente al ejército alemán para la conducción de grandes conflictos militares, incluida la guerra nuclear.

La Bundeswehr debe 'ser capaz de llevar a cabo operaciones militares contra un oponente igual en combate de armas combinadas, y en el futuro también en dimensiones combinadas, en todo el espectro hasta e incluyendo el combate de alta intensidad', dice. Para ello, 'son necesarias capacidades militares de disuasión en todos los ámbitos, incluida la participación nuclear'.

Además, las fuerzas armadas alemanas tendrían que 'ser capaces de ofrecer a los dirigentes políticos opciones militares flexibles y proporcionar fuerzas y capacidades capaces de actuar en todas las dimensiones, adaptadas a la situación'. Tendrían que 'actuar rápidamente y sin fisuras en todas las dimensiones y ser capaces de funcionar en todo el espectro de dimensiones al mismo tiempo'. El 'principio rector' debe ser: ' Organizarse mientras se lucha'.

No cabe duda de que en las actuales negociaciones de coalición entre los socialdemócratas (SPD), los demócratas libres (FDP) y los verdes se está discutiendo la aplicación de esta agresiva agenda de política exterior y de defensa. Al igual que con la formación del gobierno hace cuatro años, las conversaciones se están llevando a cabo en estricto secreto. La clase dirigente sabe que su agenda es profundamente odiada por la población y se enfrenta a una tremenda oposición.

El líder del grupo parlamentario del SPD, Rolf Mützenich, reaccionó con nerviosismo a las amenazas abiertas de Kramp-Karrenbauer contra Rusia. Dijo a la DPA que ella no debería lastrar el trabajo de un futuro gobierno federal. Sus 'recientes juegos mentales ... sobre el uso de armas nucleares en un conflicto con Rusia' son 'irresponsables'. Ella 'lamentablemente no difiere de las amenazas igualmente infundadas de la parte rusa'.

Las declaraciones de Mützenich son falsas en dos aspectos. Por un lado, sabe muy bien que el agresor no es Rusia, sino la OTAN. Desde la disolución de la Unión Soviética, hace 30 años, la alianza militar avanza sistemáticamente hacia la frontera rusa. El SPD desempeña un papel central en esto. El presidente federal socialdemócrata en funciones, Frank-Walter Steinmeier, apoyó como ministro de Asuntos Exteriores el golpe de Estado de la derecha en Ucrania en 2014 para instalar un régimen antirruso en Kiev y debilitar a Moscú. El posterior envío de tropas de combate alemanas a Europa del Este también se produjo con el apoyo explícito del SPD, que ha dirigido el Ministerio de Exteriores de forma ininterrumpida durante ocho años.

El lunes, el portavoz del gobierno, Steffen Seibert, defendió las amenazas nucleares de Kramp-Karrenbauer como una aplicación lógica de la política de la gran coalición. Mientras algunos Estados entiendan las armas nucleares como un medio de conflicto militar, 'es necesario mantener una disuasión nuclear en el marco de la OTAN', dijo cínicamente. Ese es 'también el caso del acuerdo de coalición'.

Cabe destacar que la semana pasada se celebró en Italia el ejercicio anual de armamento nuclear 'Steadfast Noon'. Bombarderos de combate belgas, holandeses, italianos y alemanes participaron en la práctica nuclear; es decir, para entrenarles en el uso de bombas atómicas.

El régimen de Putin no tiene nada que ofrecer cuando se trata de oponerse a los preparativos occidentales para la guerra. Representa los intereses de una oligarquía corrupta que se ha enriquecido con la restauración del capitalismo y teme la creciente oposición social y política de la clase trabajadora tanto como las potencias imperialistas. Moscú está respondiendo a las amenazas de Washington, Bruselas y Berlín con una mezcla de maniobras diplomáticas y militares que aumentan aún más el riesgo de guerra.

Según el Ministerio de Defensa ruso, el agregado de defensa de la Embajada de la República Federal de Alemania en Rusia fue convocado el 25 de octubre. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, dijo en una declaración oficial que se espera que 'haya personas sensatas en la dirección alemana que puedan evitar que su ministro de defensa quiera poner a prueba a nuestras fuerzas armadas de forma imprudente'.

De hecho, el desarrollo actual, así como la experiencia histórica, demuestran que no hay ninguna facción 'sensata' en la dirección alemana. Su giro hacia el militarismo, el fascismo y la guerra tiene razones objetivas que, al igual que en la primera mitad del siglo XX, tienen su origen en la profunda crisis del sistema capitalista. Sólo hay una manera de detener esta peligrosa evolución: construir un movimiento internacional antibélico basado en la clase obrera y que luche por el derrocamiento del capitalismo y por una perspectiva socialista.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 28 de octubre de 2021)