Enfrentándose a la ira creciente de los trabajadores de UPS por su propuesta de contrato claudicante hecha pública el 10 de julio, el sindicato Camioneros ahora busca calumniar la oposición de los trabajadores diciendo que es obra de “trolls de internet”.
El jueves pasado la Sección 174 de Camioneros publicó un vídeo de tres minutos, con música de Beethoven de fondo y toda la complejidad tecnológica de un proyecto de animación de instituto de secundaria, advirtiendo a los trabajadores que no hagan caso a las declaraciones de “trolls” que critican el acuerdo de UPS en las redes sociales.
El acuerdo del sindicato incluye la creación de un nuevo segundo nivel de trabajadores “híbridos” conductores de almacén a quienes se pagará menos que a los conductores actuales. Permite la explotación continuada de los trabajadores por más de 70 horas a la semana durante la temporada punta, y mantiene salarios de pobreza para los trabajadores a tiempo parcial que componen más del 70 por ciento de la fuerza laboral.
El ataque de Camioneros a los “trolls de internet” a nada se parece más que a la campaña de propaganda llevada adelante por el sindicato United Auto Workers (UAW) durante las negociaciones del contrato de 2015 con los tres grandes fabricantes de coches.
Después de que los trabajadores de Fiat Chrysler rechazaran el contrato claudicante del UAW por un margen de 2 a 1, los ejecutivos del sindicato se gastaron casi medio millón de dólares para contratar a BerlinRosen, una empresa de relaciones públicas de la ciudad de Nueva York vinculada al Partido Demócrata, para imponer la entrega. Su campaña incluyó afirmaciones de que la información difundida on line por los trabajadores, incluyendo el Boletín del Trabajador Automotor del WSWS, eran “noticias falsas”. El sindicato fue denunciado de manera generalizada por parte de los trabajadores por fraude en la votación para imponer el acuerdo al final.
Desde entonces ha quedado al descubierto que altos cargos del UAW estaban aceptando millones de dólares en sobornos de los fabricantes de coches a lo largo de las negociaciones entre 2009 y 2015, al tiempo que el sindicato introducía un nuevo puesto de segundo nivel para nuevos contratados con salarios de pobreza y un horario de trabajo alternativo con turnos de 10 horas. La semana pasada, se informó de que Dennis Williams, el presidente de UAW recientemente jubilado, personalmente refrendó esos sobornos corruptos.
Los ataques del UAW al World Socialist Web Site prefiguraron la continua campaña sobre las “noticias falsas” por parte del Partido Demócrata y las agencias de inteligencia que tienen por objetivo justificar la censura de los sitios de noticias de izquierdas y alternativos. Esta campaña ha sido intensificada tras las huelgas por parte de los docentes en West Virginia, Oklahoma y Arizona este año, durante las cuales los docentes utilizaron las redes sociales para organizarse de manera independiente de los sindicatos.
Si acaso, el ataque de Camioneros a los “trolls de internet” es todavía menos sofisticado que la campaña del UAW sobre las “noticias falsas”. Su vídeo de hecho destaca el carácter brutal de la claudicación, porque es incapaz de responder a ninguno de los ataques al acuerdo que él mismo cita.
El vídeo incluye una serie de burbujas de habla animadas con citas hechas ostensiblemente por “trolls”, pero que son de hecho ataques al acuerdo hechos de manera generalizada por los trabajadores en las redes sociales, incluyendo a la página del “Vote No al contrato de UPS”, que tiene más de 20.000 miembros.
Estas incluyen: “He oído que nos habéis vendido respecto a la semana de 70 horas”; “He oído que los de los nuevos [niveles] van a tomar todo nuestro trabajo y van a hacerlo por menos dinero”; “He oído que la compañía va a abusar completamente de los [de los nuevos niveles]”; y “¡He oído que podríamos haber conseguido un acuerdo mucho mejor si no hubiérais tenido miedo de ir a la huelga!”. A esas acusaciones no responden con argumentos; las tachan con rayas rojas y un “NO” gigante, seguido por una solicitud para que los trabajadores no confíen en los “trolls de internet” sino solo en su “dirigencia sindical local de confianza”.
Los ejecutivos de negocios adinerados que dirigen el sindicato obrero-patronal llamado Sindicato Camioneros evidentemente creen que los trabajadores nacieron ayer.
Entre las declaraciones de los trabajadores en Facebook en respuesta al vídeo, Mark, un conductor de UPS, comentó: “Solo tengo una cosa que decir. ¿Dónde está el poder de mi cotización al sindicato que el supuestamente gran sindicato me cobra absolutamente todos los meses? ¿Por qué demonios alguien dejaría que UPS sometiera esto a voto? Nadie menciona siquiera el billón de dólares que UPS recibió este año gracias a los recortes impositivos del presidente Trump, del cual nosotros los empleados no [hemos] visto nada.. [A]sí como lo veo yo, el SINDICATO en realidad nos fastidió, 31 años en UPS y nunca he visto que se votara un contrato y que volviera como [un] no”.
No hay ninguna manera de que los trabajadores de UPS defiendan sus intereses mediante el sindicato Camioneros. El sindicato no representa a los trabajadores; es una organización de gestión laboral cuyo papel es ofrecer a la compañía una fuerza laboral barata y reprimir la resistencia a los recortes salariales, los acelerones y la destrucción de los derechos de los trabajadores.
Los trabajadores necesitan nuevas organizaciones para llevar adelante la lucha. Los trabajadores deberían elegir comités de base en cada depósito y almacén para dirigir una lucha para repudiar el contrato, para realizar los preparativos para una huelga nacional, y para acudir y entablar contacto con otros trabajadores de la distribución en los Estados Unidos y en otros países para una lucha común. Instamos a los trabajadores de UPS a contactarnos hoy para discutir esta perspectiva.
(Publicado originalmente en inglés el 30 de julio de 2018)