El acuerdo prevé la integración de las fuerzas armadas de las Fuerzas Democráticas Sirias y la administración autónoma de facto bajo su control con el régimen de Damasco. Es parte de los esfuerzos del imperialismo estadounidense, junto con Israel, para dominar Oriente Medio.
A pesar de la retórica sobre una guerra global contra el terrorismo islamista, Estados Unidos ha utilizado durante mucho tiempo a grupos islamistas reaccionarios en Oriente Medio y Asia. En Siria, se está asociando con un régimen de HTS que tiene sus raíces directamente en Al Qaeda.
Estados Unidos llevó a cabo un bombardeo ilegal en Bagdad, Irak, el jueves, en la última intensificación de la arremetida estadounidense-israelí en Oriente Próximo.
La ofensiva genocida contra Gaza está siendo financiada íntegramente por Washington para promover objetivos bélicos más amplios contra Irán.
Durante casi dos semanas se han celebrado multitudinarias protestas propalestinas en prácticamente todos los países para exigir el fin de la campaña militar estadounidense-israelí.
Una sucesión de presidentes estadounidenses, demócratas y republicanos, comparten la responsabilidad de los peores crímenes del siglo XXI.
Obra autobiográfica y homenaje al padre director de teatro del cineasta, pretende ser, ante todo, "un acto de resistencia" contra la devastación imperialista de la cultura y la sociedad iraquíes.
La conquista y ocupación de Irak es uno de loa mayores crímenes del siglo veintiuno.
La visita del secretario de Defensa, Lloyd Austin, a Irak en vísperas del vigésimo aniversario de la invasión estadounidense de 2003 equivalió a un regreso al escenario de un crimen histórico a escala mundial.
El 5 de febrero es el vigésimo aniversario del discurso repleto de mentiras del secretario de Estado, Colin Powell, ante Naciones Unidas en 2003 para justificar la decisión criminal del Gobierno de Bush de invadir Irak.
El equivalente a la población de Alemania, es decir, más del 1 por ciento de los 7.900 millones de habitantes del mundo, han sido expulsados de sus hogares
El WSWS entrevistó recientemente a una estudiante universitaria iraquí de 20 años que describió las devastadoras consecuencias de la invasión y ocupación estadounidense de su país.
Los documentos son evidencia de extensos crímenes de guerra. Revelan que el ejército estadounidense, bajo los Gobiernos de Obama y Trump, asesinaron deliberadamente a civiles, incluso a niños.
Las elecciones se celebran en medio de una creciente hostilidad hacia el sistema político establecido tras la invasión liderada por Estados Unidos en 2003, las protestas por la corrupción, las condiciones sociales y económicas y los cortes de agua y electricidad. Estas condiciones se ven agravadas por los bajos precios del petróleo, la pandemia de COVID-19 y las consecuencias de la retirada de Estados Unidos de Afganistán.
El horrible infierno de Nasiriyah es otro precio que paga el pueblo iraquí por la destrucción del sistema sanitario y de las infraestructuras del país por parte del imperialismo estadounidense.
Dos décadas después del comienzo de una invasión y ocupación que se cobró un millón de vidas iraquíes, Estados Unidos sigue atacando la región en la medida en que prepara guerras mayores.
El ataque se produjo mientras el Pentágono evalúa formalmente los despliegues de tropas estadounidenses en Oriente Próximo y el Gobierno de Biden persigue una política continua de confrontación con Irán.
Un contratista civil estadounidense murió de un ataque al corazón durante el ataque con cohetes, que no infligió bajas entre las tropas estadounidenses y, al parecer, apenas causó daños.
Las potencias imperialistas que orquestaron las guerras criminales están decididas a nunca tener que rendir cuentas por sus crímenes de guerra.
Irak se ha convertido en un campo de batalla político clave en la confrontación militarista del imperialismo estadounidense con Irán, exacerbando aún más su crisis.
