Con las elecciones en EE.UU. a menos de dos semanas y la votación anticipada llevándose a cabo en la mayoría de los estados, la candidata demócrata a la presidencia, la vicepresidenta Kamala Harris, participó en un foro de CNN el miércoles por la noche presentado por Anderson Cooper en el condado de Delaware, Pensilvania.

Según un rastreador mantenido por la AP, alrededor de 1,1 millones de personas ya han votado en Pensilvania, uno de los pocos estados “en disputa” que decidirán la elección. En total, la AP estima que ya se han emitido alrededor de 25,7 millones de votos anticipados en estas elecciones.

Las principales encuestas publicadas la semana pasada indican que la carrera se ha ajustado significativamente, con Trump liderando en algunas encuestas nacionales. CNBC, el Wall Street Journal y HarrisX/Forbes publicaron encuestas la semana pasada que encontraron a Trump liderando por dos puntos. Esto está dentro del margen de error de cada encuesta, pero representa una mejora para Trump sobre encuestas anteriores.

Que la carrera esté tan reñida es una acusación contra el Partido Demócrata, que ha demostrado ser incapaz y oponerse a hacer cualquier cosa que aborde la crisis social en Estados Unidos, mientras se enfoca en la escalada de la guerra en el extranjero.

El foro del miércoles fue originalmente planeado como el segundo debate entre Harris y el expresidente Donald Trump, pero este último se negó a participar. Esto no impidió que el programa de extrema derecha de Trump dominara el evento, ya que Harris y los demócratas continúan adoptando las políticas antiinmigrantes fascistas de Trump mientras defienden el genocidio en Gaza.

El evento del miércoles comenzó con Harris cediendo la “lucha por la democracia” a generales no electos que sirvieron en la administración de Trump. Ella recapituló los recientes comentarios del ex jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, caracterizando a Trump como un fascista que anhelaba “el tipo de generales” que tenía Hitler, lo que significa, para Trump, oficiales leales a él y dispuestos a ejecutar cualquier orden, sin importar cuán ilegal sea.

Cooper señaló que en la respuesta de Harris ella citaba lo que Kelly había dicho, pero ¿creía ella misma que Trump era un fascista? Harris respondió:

Sí, lo creo. Sí, lo creo. Y también creo que las personas que lo conocen mejor sobre este tema deberían ser de confianza. Personas de carrera ... en los roles más altos de seguridad nacional, generales en nuestras fuerzas armadas.

Antes y mientras se desarrollaba el golpe el 6 de enero, los demócratas se negaron a apelar a la población en general para defender los derechos democráticos. Toda su orientación, entonces y ahora, es hacia el ejército y las agencias de inteligencia.

Harris continuó alabando el inmenso apoyo que ha recibido en su campaña de los republicanos, incluidos criminales de guerra que han servido en administraciones republicanas anteriores desde Ronald Reagan. Harris presumió:

He recorrido este estado y otros con Liz Cheney, exmiembro del Congreso que fue una republicana de muy alto rango. Ella me ha respaldado; su padre, el exvicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, está votando por mí. Más de 400 miembros de, antiguos miembros de la, la administración desde Ronald Reagan, hasta ambos presidentes Bush, incluso Donald Trump, han respaldado mi candidatura.

Estos republicanos no están apoyando a Harris porque ella defenderá “la democracia”, sino porque piensan que defenderá los intereses del imperialismo estadounidense de manera más efectiva que el aspirante a dictador Trump.

Mientras CNN preseleccionó las preguntas, uno de los asistentes al evento pudo abordar la masacre en Gaza, que según estudios de este verano ha llevado a la muerte de más de 200.000 personas. Annalise Kean, recaudadora de fondos para Habitat for Humanity, preguntó a Harris: “¿Qué harías para asegurar que ningún otro palestino muera debido a las bombas financiadas por los impuestos estadounidenses?”

Harris se negó a responder directamente a la pregunta, declarando:

Así que diré, y creo que esto va a tu punto, demasiados civiles palestinos inocentes han sido asesinados. Es inconcebible, y ahora estamos en un lugar donde con la muerte de Sinwar creo que tenemos una oportunidad de terminar esta guerra, traer a los rehenes a casa, llevar alivio al pueblo palestino y trabajar hacia una solución de dos Estados donde Israel y los palestinos en igual medida tengan seguridad.

En otras palabras, las matanzas continuarán con el apoyo militar estadounidense sin cesar. Harris, sin sorpresa, no dijo nada sobre el “Plan del General”, la operación de exterminio nazi que el ejército israelí, con el respaldo de EE.UU., está llevando a cabo actualmente en el norte de Gaza.

En un patrón que se repetiría a lo largo del evento, después de que Harris se negara a abordar una consulta, Cooper haría una pregunta de seguimiento que Harris también se negaría a responder directamente. En un ejemplo, Cooper preguntó a Harris qué le diría a los votantes “que apoyan a un candidato de un tercer partido o se quedan en el sofá, sin votar en absoluto por este asunto”, refiriéndose al genocidio.

Harris respondió, absurdamente, que la matanza masiva en el extranjero es el precio a pagar para bajar los precios de los comestibles en América:

Escucha, no voy a negar los fuertes sentimientos que tiene la gente. No sé si alguien que haya visto las imágenes no tendría fuertes sentimientos sobre lo que ha sucedido, y mucho menos aquellos que tienen parientes que han muerto. Y conozco personas, y he hablado con personas.

Así que aprecio eso, pero también sé que para muchas personas que se preocupan por este asunto, también les preocupa bajar los precios de los comestibles.

De hecho, es todo lo contrario. Mientras el gobierno de Estados Unidos “no tiene dinero” para alimentar a los hambrientos o dar techo a los sin hogar, bajo Biden-Harris el presupuesto de guerra ha aumentado a más de $1 billón al año. Esta suma masiva no tiene en cuenta los miles de millones en paquetes de armas “suplementarios” y de “emergencia” que son aprobados regularmente por el Congreso.

En respuesta a preguntas bastante sencillas sobre sus prioridades futuras o qué haría de manera diferente a su jefe, Harris tropezó y se tambaleó a través de varias respuestas preparadas. No pudo proporcionar un solo ejemplo concreto de lo que haría diferente a la administración actual. Sin embargo, prometió repetidamente trabajar “de manera bipartidista” con los mismos republicanos que, en sus palabras, nominaron a un “fascista” como su candidato.

Harris dijo que trabajaría para “dejar atrás la era de la política partidista”, para “trabajar de manera bipartidista” y ofreció un “compromiso para trabajar con los republicanos”, incluyendo en “inmigración”. Harris dijo:

Te prometo que trabajaré de manera bipartidista para solucionar este problema de larga data. Creo que el pueblo estadounidense lo está exigiendo en ambos lados del pasillo, y es hora de dejar de lado el enfoque partidista sobre esto.

Cooper señaló que el apoyo de Harris al proyecto de ley fronterizo de $20 mil millones estancado incluía $650 millones para construir el muro fronterizo antihumano de Trump, al que Harris anteriormente caracterizó como “estúpido”, “inútil” y un “proyecto de vanidad medieval”. Cuestionada por Cooper si el muro seguía siendo estúpido, Harris, riéndose, respondió:

Bueno, hablemos de Donald Trump y ese muro fronterizo [risas]. Entonces recuerden, Donald Trump dijo que México pagaría por eso. Vamos. No lo hicieron. ¿Cuánto de ese muro construyó él? Creo que el último número que vi fue alrededor del 2 por ciento, y luego, cuando llegó el momento de hacer una foto, ¿saben dónde lo hizo? En la parte del muro que el presidente Obama construyó.

Cooper presionó, “Pero ¿se compromete a presentar un proyecto de ley que continúe ese muro?” Harris respondió:

Me comprometo a presentar ese proyecto de ley bipartidista para fortalecer y asegurar aún más nuestra frontera. Sí, lo haré; y sí, voy a trabajar de manera bipartidista para aprobar un proyecto de ley integral que aborde un sistema de inmigración roto.

Cooper volvió a presionar a Harris si siguiera proporcionando los $650 millones destinados bajo Trump para construir el muro, Harris respondió: “No tengo miedo de buenas ideas donde ocurran”.

Un Cooper algo sorprendido respondió, “Entonces, ¿ya no crees que es ‘estúpido’?”

Harris se quejó de que Trump realmente no construyó el muro fronterizo y que ella sería más efectiva. “Creo que lo que hizo y cómo lo hizo, no tuvo mucho sentido porque realmente no hizo mucho de nada”.

Tanto los demócratas como los republicanos representan a la clase dominante y sus intereses de clase compartidos. Tienen diferencias tácticas sobre cómo llevar a cabo las guerras y enriquecer a sus donantes, pero al final del día, ambos partidos son enemigos de los trabajadores de todo el mundo.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 24 de octubre de 2024)