La guerra de la OTAN contra Rusia por Ucrania está adquiriendo cada vez más el carácter de una movilización militar masiva y coordinada por parte de las potencias imperialistas. En varias entrevistas posteriores al anuncio la semana pasada de la operación “Steadfast Defender” —la mayor maniobra de la OTAN desde el final de la Guerra Fría— el ministro de Defensa Boris Pistorius afirmó que Alemania tiene que prepararse para una guerra directa con Rusia, una potencia nuclear.
El lunes pasado, le dijo al programa de noticias de televisión heute-journal que “tenemos que poner en marcha medios para luchar una guerra que nos obligan a combatir, y no una guerra que nosotros iniciamos, eso es evidente”. Luego agregó “Pero si somos atacados, debemos ser capaces de hacer la guerra y eso es crucial, y debemos prepararnos para ello”.
La entrevista completa dejó claro cuán concretamente la clase dominante está discutiendo escenarios de guerra que resultarían en unas muertes de millones y destruirían el continente entero. Según uno de esos escenarios, si Moscú organizara un levantamiento de la minoría rusa en los estados bálticos o atacara a uno de esos estados, Alemania tendría que responder militarmente y estar en posición de librar una guerra total.
“Eso es exactamente el punto”, dijo Pistorius, que es por eso que una brigada de combate alemana con 5.000 soldados se está armando actualmente en Lituania, “para estar presente en el terreno de inmediato”. La brigada, explicó, estaría “listos para desplegarse en 2027”.
Pistorius añadió que según los expertos militares, podría surgir una agresión rusa en los próximos cinco años. Pero, advirtió, esto era “una estimación” y “nadie lo sabe con certeza”. En cualquier caso, subrayó, los próximos tres a cinco años deben ser utilizados para “armarnos intensivamente”.
En una entrevista con el Tagesspiegel, Pistorius afirmó que un “ataque de Rusia” sería posible en “un periodo de cinco a ocho años”. Por lo tanto, consideraba “comprensible” el llamado del ministro de seguridad interior sueco para “prepararnos para la guerra, ahora”. Pero los alemanes también debían “aprender a vivir con el peligro y a prepararnos —militarmente, socialmente y en temas de defensa civil—”.
Esto equivale a una declaración de guerra a Rusia. El ministro de defensa, quien ha declarado que su objetivo es hacer a Alemania “apta para la guerra” de nuevo, está hablando públicamente sobre una posible guerra directa con Rusia. La línea de propaganda de una “guerra defensiva” pone la realidad de cabeza, retumbando las viejas mentiras del imperialismo alemán. La agresión alemana en la Primera y Segunda Guerra Mundial —incluyendo la guerra de exterminio contra la Unión Soviética, que costó la vida de 30 millones de ciudadanos soviéticos— fue descrita también por las élites alemanas en el Imperio del Káiser y bajo los Nazis como “autodefensa”, o “autodefensa impuesta”.
Hoy, el imperialismo alemán, en alianza con las otras principales potencias de la OTAN, es una vez más el agresor. Con el encierro militar sistemático de Rusia y el golpe antirruso de 2014 en Kiev, la OTAN provocó la intervención reaccionaria del régimen de Putin. Ahora cada vez está escalando más el conflicto para forzar a la Rusia rica en recursos a una guerra aún mayor para subyugarla militarmente.
Independientemente del calendario exacto que Pistorius y los demás belicistas de la OTAN tienen en mente, el mero anuncio de que Alemania y la OTAN se están preparando para la guerra incrementará la escalada. Ante las amenazas, el gobierno ruso y la dirección militar se verán forzados a prepararse ante un posible ataque de la OTAN y una guerra total.
El gran simulacro Steadfast Defender, que tiene lugar actualmente, implica las mayores maniobras de la OTAN desde el fin de la Guerra Fría. Según la OTAN, se movilizarán 90.000 soldados para fin de mayo, incluyendo cerca de 40.000 de los EE.UU., 20.000 del Reino Unido y 12.500 de la Bundeswehr (Fuerzas Armadas Alemanas). Más de 50 buques de guerra, 80 cazas, helicópteros, y drones y más de 1.000 vehículos acorazados, incluyendo 133 tanques de batalla y 533 vehículos de combate de infantería, participarán en el simulacro bélico.
Geográficamente, las maniobras se extienden a través de Escandinavia y los estados bálticos hasta Polonia, Rumania y Alemania. La Bundeswehr se jacta de que Alemania está asumiendo “responsabilidad de liderazgo” para el ejercicio, y sirviendo “como un gran centro para los necesarios despliegues de tropas de fuerzas nacionales e internacionales”.
Berlín también está avanzando con la entrega de más armas a Ucrania. Este año, Alemania expandirá masivamente su apoyo a Kiev, declaró Pistorius en una reunión del Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, el llamado Formato Ramstein, el martes. Entre otras cosas, planea entregar seis helicópteros multipropósito SEA KING Mk41 del inventario de la Bundeswehr. La entrega incluye un paquete completo de accesorios y piezas de repuesto, así como soporte para entrenamiento de vuelo y técnico.
Según Pistorius, los helicópteros Sea King “ayudarán a los ucranianos en muchas áreas: desde el reconocimiento sobre el Mar Negro hasta el transporte de soldados”. En la guerra contra Rusia, agregó, “la defensa aérea sigue siendo la prioridad número uno”. Por lo tanto, se alegró de que Alemania, junto con Francia, “asuma la responsabilidad en la coalición de capacidad de defensa aérea y coordine juntamente con más de 20 socios”. También se está buscando el objetivo de entrenar a 10.000 soldados ucranianos en Alemania en 2024.
La lista oficial del gobierno alemán de servicios de apoyo militar para Ucrania está creciendo cada vez más, y muestra la medida en la que Berlín está ya en guerra contra el ejército ruso en Ucrania. Los siguientes elementos se listan en la sección “en preparación/implementación”:
- 105 tanques de combate principales LEOPARD 1 A5
- 30 vehículos de combate de infantería MARDER
- 42 Vehículos de transporte blindados (APC)
- 15 tanques antiaéreos GEPARD
- 9 sistemas de defensa aérea IRIS-T SLM
Además, hay vehículos de recuperación blindados, vehículos de tendido de puentes blindados y vehículos blindados para el despeje de minas, así como varios tipos de munición, incluyendo 250.000 rounds de munición de artillería de 155 mm y 259.680 rounds de munición Gepard.
En una entrevista con Tagesspiegel, Pistorius presumió de que Alemania era “el segundo mayor patrocinador” de Kiev en términos de ayuda militar, después de los EE.UU., “y por lo tanto la mayor en Europa”. Según las cifras oficiales del gobierno alemán, los fondos para el “presupuesto de defensa” ascendieron a unos €5,4 mil millones en 2023 (tras €2 mil millones en 2022). Y las autorizaciones de compromiso para 2024 y los años siguientes ya ascienden a unos €10,5 mil millones. Estas sumas gigantescas son solo una fracción del monto total de dinero que se está canalizando hacia la carrera armamentística.
¿Qué son los factores que impulsan a la clase dominante hacia una guerra total? En una reciente perspectiva sobre la escalada de la guerra de la OTAN, el WSWS escribió:
Al igual que en las dos guerras mundiales del siglo XX, las élites gobernantes imperialistas sienten que tienen poco tiempo, y que solo una escalada rápida puede contrarrestar las poderosas fuerzas políticas —en la situación militar y la lucha de clases internacional— que están operando en su contra.
Esto se aplica en particular al imperialismo alemán. La clase dominante está reaccionando al desastre de la ofensiva ucraniana, que a pesar de decenas de miles de soldados muertos, no ha traído éxitos significativos. También está respondiendo a la posibilidad del regreso de Trump a la Casa Blanca al golpear el tambor cada vez de manera más agresiva a favor de la guerra y una política de gran potencia alemana-europea más independiente.
Pistorius exigió en Tagesspiegel:
“Necesitamos más capacidad europea de acción—independientemente del resultado de las elecciones en EE.UU.. Necesitamos hacer la industria de defensa en particular más eficiente”.
Lo que más teme la élite es que la clase trabajadora frustre sus planes de guerra. Durante meses, millones en todo el mundo han estado protestando contra el genocidio de Israel en la Franja de Gaza, que es apoyado cínicamente por la clase dominante en Alemania bajo el lema de “Nunca más”. En Alemania, luego de masivas protestas de agricultores, los maquinistas están actualmente en huelga, y millones se han manifestado contra la alternativa de extrema derecha para Alemania (AfD) y el desplazamiento notable hacia la derecha de la clase dominante en su conjunto.
Para llevar a cabo la lucha contra el fascismo y la guerra, la oposición se debe desarrollar en un movimiento internacional de la clase trabajadora contra el capitalismo, armada con un liderazgo socialista claro y una perspectiva. Justamente para eso es que Sozialistische Gleichheitspartei (Partido de Igualdad Socialista, SGP) está luchando, junto con sus partidos hermanos en toda Europa e internacionalmente, en las próximas elecciones europeas de Junio. La declaración electoral del SGP dice:
La única conclusión legítima que se puede hacer del genocidio alemán nazi y el Holocausto, los peores crímenes en la historia humana, es esta: La clase trabajadora nunca debe permitir de nuevo la guerra y el fascismo, y debe eliminar una vez por todas la raíz de este horror, el capitalismo. ... Exigimos:
Detengan la guerra de la OTAN en Ucrania! ¡No a las sanciones o entregas de armas!
¡Dos guerras mundiales son suficientes! ¡Detengan a los promotores de la guerra!
€100 mil millones para guarderías, escuelas y hospitales, en vez de armamento y guerra!
(Artículo publicado originalmente en inglés el 27 de enero de 2024)